"Sería muy engorroso volver a la época del trueque"

Una de las premisas que adelantaba Javier Milei en el momento de ser ungido presidente de los argentinos fue su plan de llegar a la emisión cero. Lo cierto es que, según las palabras de varios economistas, en lo que va del año el Banco Central ha emitido más pesos que en el mismo período del 2023.

Para comprender un poco más este estado de cosas, la producción de Sin Verso (lunes a viernes de 9 a 12, por Ciudadano News 91.7) se comunicó con Alejandro Barros, economista y profesor de Economía Monetaria en la Universidad de Morón. "No hay que asustarse tanto con el tema de la emisión, porque uno emite para que se permita la circulación de bienes y servicios dentro de una economía. De otro modo sería volver a la época del trueque, y sería muy engorroso trocar bienes entre la gente. Cuando la economía decrece, es difícil retirar moneda. Esto provoca que después haya inflación, porque hay más billetes de lo que se necesita", comenta al principio de la charla.

"Otro concepto importante es que la emisión de moneda respalda lo que se llama 'generación de valor agregado'. Es decir, cuando las industrias, sean de servicios o de productos primarios, producen algo, le agregan un valor a esa producción. Ese agregado hace crecer a la economía, porque si se tiene más plata se pueden comprar más bienes y, en consecuencia, producir más", explica Barros. En este mismo sentido, asegura que cuando este circuito está equilibrado, no hay inflación. "El problema es cuando se crea el estado para prestar servicios que no puede prestar el privado", agrega.

Por definición, el servicio del estado no genera valor agregado: todo lo que ingresa tiene que salir como un servicio. "Mientras esté todo en equilibrio, y con un estado relativamente chico, cualquier emisión monetaria no debería generar inflación. El problema es cuando el estado empieza a crecer y a tomar gran cantidad de impuestos del sector privado, limándolo paulatinamente. Es el proceso que tenemos desde hace 80 años", asegura el economista.

¿Se achicó el Estado?

Gabriel Landart, conductor del programa, le consultó a Alejandro Barros acerca de la historia a largo plazo de la inflación argentina. "Desde el 2000 para acá, el Estado se achicó en forma relativa. En esas circunstancias, uno para de emitir para el Estado. Actualmente, la actividad privada sigue funcionando, en la medida en que ese Estado no le exija más a los privados. Estos necesitan fondos, dinero circulante, porque genera valor", detalla el economista.

"El problema es la inflación que uno tiene en forma residual, de ahí viene la gran diferencia entre efectivo y nominal. En términos efectivos se mantuvo estable, porque a principios de año hubo un decrecimiento efectivo, pero en abril y mayo volvió a crecer. Y creció también el resultado de las exportaciones que se vendieron al exterior", asegura Barros. "La inflación es otra forma de impuesto. Es una forma encubierta o indirecta de cobrar un impuesto".