Ciudadano News
Es historia...

La reunión secreta de dos patriotas que cambió la historia de Latinoamérica

En julio de 1816 se encontraron en Córdoba el General José de San Martín y el Director Supremo Juan Martín de Pueyrredón con el objetivo de idear un plan audaz.

Carlos Campana

Por Carlos Campana

29 Julio de 2024 - 09:40

Grabado que ilustra la reunión entre San Martín con Pueyrredón. (Web)
Grabado que ilustra la reunión entre San Martín con Pueyrredón. (Web)

En un día templado del invierno de 1816, el Gobernador Intendente de Cuyo, José de San Martín, se preparaba para iniciar un viaje trascendental. 

La ciudad de Mendoza, con sus actividades cotidianas, se encontraba en un estado de expectante calma. La partida del Gobernador no era un evento común, menos aún cuando se trataba de una misión secreta.

Su destino era una reunión crucial con el recién nombrado Director Supremo, Juan Martín de Pueyrredón, y el objetivo, poner en marcha un audaz plan para liberar a Chile del dominio realista.

En Mendoza, la atmósfera estaba cargada de tensión y esperanza. Los representantes mendocinos en el Congreso de Tucumán, Tomás Godoy Cruz y Juan Agustín Maza, se encontraban allí trabajando incansablemente por la Independencia y la constitución de las Provincias Unidas del Río de la Plata. 

Seguían las instrucciones precisas del coronel mayor San Martín, quien había puesto en sus manos la tarea de defender los ideales revolucionarios en la arena política.

Mientras sus compatriotas debatían en Tucumán, San Martín se enfocaba en la defensa de Cuyo, anticipando posibles ataques realistas. A finales de junio de 1816, había acordado una reunión secreta con Juan Martín de Pueyrredón, elegido por el Congreso para dirigir los destinos de las Provincias Unidas del Sud.

Esta cita era un punto de inflexión, un momento donde se gestaba el destino no solo de la incipiente nación, sino de toda Sudamérica.

Para garantizar la estabilidad en su ausencia, el Libertador delegó el mando político y militar en su hombre de confianza, el brigadier Bernardo de O'Higgins. El líder chileno, valiente y leal, asumió temporalmente el control de Cuyo, asegurando que la provincia estuviera preparada para cualquier contingencia.

Bernardo O'Higgins ocupó el cargo interino de Gobernador Intendente de Cuyo.
Bernardo O'Higgins ocupó el cargo interino de Gobernador Intendente de Cuyo.

Rumbo a Córdoba

Con todo preparado, José de San Martín inició su viaje hacia Córdoba. Lo acompañaban el administrador de Correos de Mendoza, Juan de la Cruz Vargas; el auditor de Guerra del Ejército, doctor Bernardo de Vera, y una pequeña guardia de escolta. Tomaron el 'Camino Real' -actual ruta 7- una ruta llena de desafíos naturales y obstáculos.

Bernardo de Vera y Pintado acompañó a José de San Martín a Córdoba.
Bernardo de Vera y Pintado acompañó a José de San Martín a Córdoba.

La travesía no fue sencilla. Tras una semana de marcha, de cruzar ríos y llanuras, y de hacer paradas en una veintena de postas, la comitiva llegó finalmente a la ciudad de Córdoba el 9 de julio.

Coincidentemente, en Tucumán se celebraba la declaración de la Independencia, un evento que marcaría para siempre el destino de la región.

El gobernador San Martín y su comitiva llegaron a la ciudad mediterránea y se hospedaron en la casa de José Orencio Correas, un prominente ciudadano cordobés. Margarita Arias de Correas, su esposa, los recibió con hospitalidad y calidez, preparando el escenario para un encuentro crucial.

Durante su estancia, la sociedad cordobesa agasajó al Padre de la Patria con obsequios y atenciones, reconociendo su rol fundamental en la lucha por la libertad.

La llegada del Director Supremo

Desde Tucumán, tras presenciar la jura de la Independencia, Juan Martín de Pueyrredón partió hacia Buenos Aires el 11 de julio, haciendo una parada en Córdoba para reunirse con San Martín. Aunque la entrevista había sido fijada para los días 10 o 12 de julio, parece que finalmente se llevó a cabo el 17 de ese mes.

La llegada de Pueyrredón a Córdoba atrajo la atención de todos. La ciudad, conocida por su rica historia y su vibrante vida social, se convirtió en el epicentro de la política y la estrategia militar de las Provincias Unidas.

Satisfecho por la reciente declaración de independencia, el flamante jefe de Estado se encontró con San Martín. Se abrazaron calurosamente y, tras un breve descanso, comenzaron la esperada reunión.

El encuentro decisivo

Durante varias horas, el coronel mayor José de San Martín y el primer mandatario Juan Martin de Pueyrredón deliberaron sobre las acciones a seguir tras la declaración de Independencia. El tema central fue un plan militar para liberar Chile, un objetivo clave para asegurar la independencia de la región.

En este lugar ambos héroes mantuvieron la reunión secreta.
En este lugar ambos héroes mantuvieron la reunión secreta.

Pueyrredón se comprometió a apoyar a San Martín con los recursos necesarios para la campaña, y en los meses siguientes, este compromiso se materializó con el envío de material bélico y la preparación del ejército en Cuyo.

Las deliberaciones fueron intensas. Se resolvieron múltiples aspectos logísticos y estratégicos, desde la movilización de tropas hasta la adquisición de suministros.

San Martín detalló su visión de un ejército capaz de cruzar los Andes, sorprendiendo a Pueyrredón con su audaz estrategia. El compromiso del Director Supremo quedó sellado, marcando el inicio de una campaña que cambiaría el curso de la historia.

Después de esta fructífera reunión, ambos líderes regresaron a sus respectivos lugares, satisfechos con los acuerdos alcanzados. El 1 de agosto se creó el Ejército de los Andes y San Martín fue ascendido a general en jefe de esa fuerza.

El impacto y el legado

La historia había sido sellada con un abrazo y una promesa en Córdoba, un paso fundamental hacia la liberación de Chile y la consolidación de la independencia en Sudamérica. El encuentro entre San Martín y Pueyrredón no solo forjó un plan militar, sino que también cimentó una alianza crucial para la causa patriota.

En los meses y años que siguieron, el Ejército de los Andes se convirtió en una fuerza formidable. La campaña de San Martín, con su célebre cruce de los Andes, se convirtió en una epopeya de valentía y estrategia militar. 

La liberación de Chile fue un hito en la lucha por la independencia sudamericana, uniendo a pueblos y naciones en un esfuerzo común por la libertad.

La historia de este encuentro y sus consecuencias resuena aún hoy, recordándonos el poder de la visión y el liderazgo en tiempos de crisis. San Martín y Pueyrredón, con su determinación y compromiso, demostraron que la unidad y la estrategia podían superar cualquier obstáculo, dejando un legado duradero de libertad y esperanza para las generaciones futuras.