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Crisis sanitaria

La cartilla médica se enfrenta a las prepagas y obras sociales

La tensión entre gerenciadores y prestadores del sistema privado ajusta por calidad. Especialistas advierten que el sistema se encamina hacia la quiebra.

Redacción

Por Redacción

26 Junio de 2024 - 08:50

Atención médica en el sistema de salud privado
Atención médica en el sistema de salud privado

Los prestadores de salud como sanatorios, clínicas, laboratorios, consultorios, que no pertenecen a las prepagas alertaron sobre la profundización de la crisis sanitaria.

Los fuertes aumentos en las cuotas de las prepagas dejaron afuera del sistema a más de 100 mil afiliados, y el diferimiento de pagos que les aplicaron los gerenciadores, representa una quita del 50% en el incremento original.

En febrero y marzo, meses en los que rigió el congelamiento de las cuotas por intervención del Gobierno ante la presentación de gran cantidad de medidas cautelares, no hubo medidas que modificaran los focos de tensión. 

Una de las demandas de los prestadores era corregir el Programa Médico Obligatorio (PMO), instituido en la década del 80, que son las prestaciones básicas cubiertas cualesquiera sean los planes.

Se suman además a sus reclamos la desgravación impositiva, instaurar algún valor compensatorio para cubrir el desfasaje entre costos y valores prestacionales o asociar el aumento de las prepagas a los honorarios que perciben los prestadores, ninguno concretado.

En este caso, los prestadores se ilusionan con el "voucher sanitario", para que puedan aprovechar la capacidad ociosa sin sufrir los efectos de la intermediación, e implica que el profesional sea libre de elegir hasta dónde cubrir y no.

Sacar de la cadena de la relación con el paciente a intermediarios financieros y que además las clínicas puedan tener su propio círculo de asociados para completar los tratamientos que el voucher no cubra, son avizorados como un futuro para la medicina.

En esta transición, advierten los especialistas  de las cartillas médicas que se sienten sometidos a la discrecionalidad de los gerenciadores y alertan que el sistema está encaminado hacia la quiebra y la desatención de la población.

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Calidad de atención

"Es necesario establecer parámetros que aseguren la calidad en la atención en tiempo y forma, pero eso depende, en gran parte, de que los valores prestacionales no sean inferiores a los costos de tales prestaciones. Ese es el camino más corto a la quiebra del sistema y la consiguiente desatención", advirtieron Omar López Mato y Juan Manuel Ibarguren, miembros de CAMEOF.

Están pendientes de que se haga un plan de contingencia cuando las prepagas y obras sociales no puedan cumplir con sus compromisos y destacan que algunos de ellos promocionaron promesas desmesuradas a fin de atraer clientes.

Remarcaron que ese "plus tentador" (cirugías plásticas y descuentos en productos que nada tienen que ver con la salud) está reemplazando a la cobertura básica que el Estado no garantiza en el sistema público.

En caso de que se agrave más aún la crisis sanitaria, vaticinan que "los afiliados (especialmente los más antiguos y vulnerables) estarán en una situación desesperante y las cuentas impagas a sus prestadores profundizarán los problemas económicos del sistema". 

Desconfían de que la "mano invisible" del mercado lo pueda corregir el problema a corto plazo. 

Sistema de salud solidario

El sistema de salud, al igual que el previsional, son solidarios y están basados en un sistema piramidal: cuanto más gente sana y joven haya en la base y menos enfermos en la cúspide, mejor cerrarán los números empresarios.

Como las recurrentes crisis económicas argentinas disminuyeron la población con posibilidades de acceso a la salud privada y solo  quedaron las personas que no podían salir del sistema por sus problemas de salud, los voceros de los prestadores añaden que la población envejeció y que se dio vuelta la pirámide, de modo que el sistema profundizó la crisis.

Por su parte, las empresas  gerenciadoras de medicina privada dicen no contar con los medios para sostener a los afiliados que, durante 10, 30 o 50 años, aportaron la cuota para tener una medicina de "excelencia", como fue promocionada.

Consideran muy difícil cumplir cuando la consulta difícilmente llega a los 10 dólares, "quizás la más baja del mundo", explican.

Esto implicaría el riesgo para los afiliados que pagaron por décadas su cuota, de que por un impedimento transitorio, pierda todo lo invertido en su salud por una dificultad financiera ajena a su voluntad de pago. 

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Radiografía del sector 

  • El 14% de la población cuenta con servicios de medicina privada; esto representa a más de 6 millones de personas.
  • Las jurisdicciones que tienen más personas afiliadas a estas empresas son la Ciudad de Buenos Aires, Tierra del Fuego y la provincia de Buenos Aires.
  • Especialistas señalan que los pacientes optan por la medicina, prepaga por la demanda de nuevos tratamientos y las mejoras tecnológicas en el campo de la salud y debido a deficiencias en la oferta pública.

Las prepagas pueden abarcar distintos tipos de entidades, de acuerdo con la Ley 26.682 que regula la actividad.

Pueden ser sociedades comerciales (Swiss Medical, Galeno, OMINT, Medicus y Paramedic son las que tienen más afiliados), obras sociales con planes superadores (OSDE y Accord), cooperativas (ACA Salud), mutuales (Sancor Salud y Federada Salud), asociaciones civiles (Medifé y Hospital Italiano) y fundaciones (Fundación Médica Mar del Plata).

La mayor proporción de asociados se concentran en las sociedades comerciales (39,3%), los planes superadores de obras sociales (36,2%) y las mutuales (11,6%). Swiss Medical, Galeno, OSDE y Sancor Salud son las principales empresas de cada categoría en cuanto a cantidad de afiliados, de acuerdo con datos de la Superintendencia de Servicios de Salud.

La presencia del sector privado es más amplia si se lo analiza como prestador de servicios. Entre hospitales, sanatorios, consultorios particulares, la prestación privada es responsable del 50 o el 60% de la oferta de servicios.

Es que las obras sociales sindicales, las provinciales, el PAMI inclusive, en su mayoría no tienen prestadores propios, entonces contratan a los privados.

Con información de NA y Chequeado