Las fuerzas armadas de Estados Unidos confirmaron la destrucción de una nueva embarcación de narcotráfico en el Pacífico oriental, lo que dejó como resultado la muerte de tres presuntos narcoterroristas. El ataque ocurrió este sábado en aguas internacionales, bajo órdenes directas del secretario de Defensa, Pete Hegseth. Esta acción se enmarca en la "Operación Lanza del Sur", una campaña militar activada en septiembre por el presidente Donald Trump contra organizaciones terroristas vinculadas al tráfico de drogas en el Caribe y el Pacífico.
Aumenta la tensión con el despliegue del USS Gerald R. Ford
Según el comunicado del Comando Sur, se ejecutó un "ataque cinético letal" contra el buque mientras transportaba estupefacientes por una ruta clave. Este incidente se suma a una ofensiva sostenida. Desde el inicio de la operación, Estados Unidos ha destruido más de veinte embarcaciones y ha abatido a más de 70 personas en distintas intervenciones.
La tensión regional se ha intensificado simultáneamente. Este domingo, el portaaviones USS Gerald R. Ford, el más grande y avanzado de la flota estadounidense, ingresó al mar Caribe. Este grupo naval, que incluye destructores, busca "desmantelar organizaciones criminales transnacionales".
El despliegue ha generado fuertes quejas diplomáticas de Venezuela y Colombia. El régimen de Nicolás Maduro calificó la presencia militar como una "amenaza explícita" a su soberanía, especialmente tras ejercicios conjuntos de EEUU con Trinidad y Tobago. Estados Unidos mantiene una recompensa de 50 millones de dólares por la captura de Maduro, acusándolo de narcotráfico. El presidente Trump se limitó a decir que se ha "avanzado mucho" para detener el flujo de drogas desde Venezuela.