Logró jugar al Counter-Strike con la mente gracias al implante de un chip

La tecnología sigue rompiendo barreras, y esta vez lo hace en el ámbito de los videojuegos. Neuralink, la startup de neurotecnología fundada por el magnate sudafricano Elon Musk, logró un avance significativo al permitir que un paciente paralítico juegue a Counter-Strike 2 usando únicamente su mente. 

El dispositivo, un implante cerebral que busca ofrecer a personas con parálisis la capacidad de manejar dispositivos digitales a través del pensamiento, está demostrando su eficacia en un segundo paciente de prueba.

El segundo paciente, identificado como Alex, logró controlar el popular juego de disparos en primera persona sin necesidad de utilizar sus manos. Este avance se produce después de que Neuralink resolviera un problema técnico que se presentó en el primer paciente que recibió el implante, Noland Arbaugh, quien experimentó una retracción de los hilos del dispositivo, lo que afectó la capacidad de los electrodos para captar señales cerebrales. En el caso de Alex, la empresa tomó medidas para evitar esta complicación, logrando estabilizar el implante.

Neuralink explicó que aplicó estrategias durante la cirugía para minimizar el movimiento del cerebro y reducir el espacio entre el implante y la superficie cerebral, garantizando así un rendimiento óptimo del dispositivo. Estas medidas permitieron a Alex no solo jugar a videojuegos como Counter-Strike 2, sino también navegar por Internet, interactuar en redes sociales y manejar el cursor en su computadora portátil.

Antes de contar con el implante, Alex utilizaba un Quadstick, un dispositivo controlado con la boca, que le permitía mover a su personaje en el juego, aunque con limitaciones significativas. Con el chip de Neuralink, Alex pudo mejorar notablemente su experiencia de juego: "Es increíble poder moverme y mirar a donde quiero simplemente pensándolo", comentó, destacando la libertad que ahora experimenta al jugar.

Según Neuralink, Alex logró dominar el control del cursor con su mente en solo cinco minutos y en pocas horas superó la precisión que había alcanzado con otras tecnologías "asistivas". Además, rompió el récord mundial de control del cursor con una interfaz cerebro-computadora (BCI), estableciendo un nuevo estándar en la utilización de esta tecnología.

Pero el avance de Alex no se limitó a los videojuegos. El segundo día tras la implantación, pudo utilizar software de diseño 3D, como Fusion 360, para crear un soporte personalizado para su cargador Neuralink, el cual fue impreso en 3D y añadido a su configuración.

El implante de Neuralink funciona a través de 1024 electrodos distribuidos en 64 cables extremadamente delgados que registran la actividad neuronal en la región del cerebro encargada de la intención de movimiento. Además, la compañía está desarrollando otro chip, Blindsight, con el objetivo de restaurar la visión en personas ciegas.

Los próximos pasos de Neuralink incluyen la decodificación de múltiples clics e intenciones de movimiento simultáneo para ofrecer una funcionalidad completa de mouse y controlador de videojuegos, así como la implementación de algoritmos que permitan reconocer la intención de escritura a mano, facilitando así una entrada de texto más rápida. Estas innovaciones no solo devolverán la autonomía digital a quienes no pueden usar sus extremidades, sino que también permitirán la comunicación a personas con condiciones neurológicas que les impiden hablar, como la esclerosis lateral amiotrófica (ELA).