Reforma laboral: las implicancias para los trabajadores argentinos

En una entrevista con El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook y YouTube de Ciudadano. News), Lucas Battiston, especialista en Derecho Laboral y miembro destacado de la Asociación Argentina de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, ofreció perspectivas profundas sobre la situación laboral en Argentina y la necesidad imperiosa de reformas.

A dos meses de la firma del "Pacto de Mayo", el Gobierno nacional retoma las negociaciones con gobernadores y legisladores sobre la nueva ley "bases" y el paquete fiscal. Nicolás Posse, jefe de Gabinete, y Guillermo Francos, ministro del Interior, se reunieron con diputados del PRO, y continuarán en Salta, donde se llevará a cabo una cumbre con diez mandatarios del Norte Grande que exigirán fondos y obras.

La nueva reforma laboral incluye modificaciones en materia de indemnizaciones, período de prueba, aportes a sindicatos, derecho a huelga, ultraactividad y registración de empleados, entre otros.

Uno de los primeros temas consultados al entrevistado, fueron en torno a la intención del Gobierno de derogar multas por contrataciones deficientes, en un contexto con un 45% de informalidad laboral en el país.

Battiston comenzó por definir la contratación deficiente como aquella relación laboral que no está registrada en su totalidad o que lo está de manera parcial. Ejemplificó esto con casos de fechas de ingreso incorrectas o registros salariales incompletos. Resaltó la importancia del DNU 2023, que derogó leyes que sancionaban el empleo no registrado, aunque actualmente está suspendido por decisiones judiciales.

En cuanto a la legislación laboral vigente, Battiston destacó la necesidad de una reforma integral. Señaló que la ley de contrato de trabajo data de 1974, cuando la realidad laboral era muy diferente, y muchos convenios colectivos aún tienen más de 50 años de antigüedad. Abogó por abordar las causas de la informalidad laboral en lugar de simplemente castigar sus consecuencias. 

“Lo primero que hay que ver, son los impuestos al trabajo en Argentina, que son muy altos”.

En cuanto a la comprensión de los derechos laborales por parte de los empleados, el abogado subrayó la incertidumbre creada por la suspensión del DNU y la discusión sobre su alcance. Admitió que la derogación de multas no solucionaría el problema de fondo y advirtió sobre posibles compensaciones alternativas por incumplimientos laborales.

Battiston abogó por una diferenciación en la legislación laboral entre empresas grandes y pymes, así como entre empleados de alta dirección y empleados de nivel operativo. Señaló ejemplos como el modelo español de legislación laboral, que ofrece diferentes niveles de protección según el cargo ocupado.

Finalmente, el entrevistado destacó ejemplos de reformas laborales en otros países, como Brasil, y su flexibilización de la negociación colectiva, y planteó la necesidad de mejorar el sistema de seguridad social en Argentina, especialmente en lo que respecta al desempleo.

“Ningún país tiene una legislación perfecta. Si tenemos que tomar algunos ejemplos, es importante lo que hizo Brasil en la reforma laboral en el 2017 donde estableció la posibilidad de bajar el nivel de negociación colectiva, sino que sea todo en un nivel macro, porque permite mayor flexibilidad; que se negocie la impronta o la particularidad de cada empresa cara a cara con un sindicato”, aportó el experto.

“Es interesante el esquema de España respecto de alta dirección. Lo que quieren hacer del fondo de cese laboral, creo que es impracticable en Argentina con este nivel de costo laboral. Otro tema importante, que no lo sé poner en un país específico, tomaría como ejemplo el sistema de seguridad social europea, una materia pendiente en nuestro país, todo lo que es la cuestión de desempleo. Una persona hoy se queda sin empleo y lo que cobra es un monto muy bajo. Sería importante contar con un sistema de protección más razonable porque eso generaría el costo indemnizatorio”, cerró.

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