Ciudadano News

Amenazan a un periodista en Mendoza por investigar a Our Ranch

La provincia cuyana no es la única en la que el sistema piramidal ha sido denunciado, en las últimas horas se conoció sobre la preocupación que hay en Catamarca

Por Carlos Fernández Giménez

28 Septiembre de 2021 - 19:25

Captura-de-Pantalla-2021-09-21-a-la(s)-23.58.11-(2)
Captura-de-Pantalla-2021-09-21-a-la(s)-23.58.11-(2)

Un periodista denunció haber sido amenazado en Mendoza luego de que inició una investigación al sistema de inversiones Our Ranch, autodenominado como “una aplicación de cooperación en línea promovida por una empresa internacional p2p”. Esto último, según lo que se conoce en el mundo de las finanzas reales como el de las criptomonedas, del estilo persona a persona. En idioma inglés “person to person”.

Se trata de Christian Sanz (foto) autor de varios libros entre los que se cuenta el del caso Nisman, quien el 3 de setiembre denunció públicamente, bajo el calificativo de “sicario”, a Gabriel Fader. Según el mismo denunciante “fue enviado por Estefanía Terán”, una joven mendocina que ya ha motorizado en el pasado denuncias resueltas por la Justicia provincial en su contra.

La novedad salió a la luz luego de que advirtiera sobre el sistema piramidal que por el mes de agosto promocionara ganancias semanales de $20 mil pesos. En ese momento, el hombre que reside en Mendoza hace varios años, luego de haber nacido en Buenos Aires marcó “que las estafas piramidales no son para nada novedosas”. Y que “prenden en la gente por la necesidad concreta de ganar dinero rápido y fácil”.

A modo de ejemplo, recordó que “la última estafa de ese tenor fue la conocida Ganancias Deportivas, que hizo estragos en San Rafael y aún es parte de una investigación judicial exhaustiva y reveladora”.

Ahora, todo fue conocido a través del medio Mendoza Today, donde ventiló que “ha aterrizado en Mendoza un nuevo timo, con oficinas y todo. A puro merchandising y todo lo demás. Se llama Our Ranch y nos invita a comprar vacas virtuales que jamás veremos”.

“Cuando empecé a contar esto habían muy pocos damnificados, entre 50 o 60. Es un sistema de gente que pide plata, prometiendo ganancias descomunales, sin explicar bien cómo se generan esas ganancias y lógicamente en algún momento el dinero nunca va a alcanzar para pagar todas las promesas. Cuando se pide a una persona que primero tiene que pagar para trabajar ya se observa el primer síntoma de que algo raro hay. Y después de esa nota recibí una embestida muy fuerte de parte de esta gente…”, recordó Sanz.

Primero fue a través de las redes sociales “a través de una tal Estefanía Terán, del novio que se llama Jorge Corriols y después de Gabriel Fader, quien me fue a buscar donde yo trabajaba antes y lo hizo para apretarme directamente. Se puso muy violento según me contaron los colegas que lo recibieron. Es gente muy pesada y así arrancó todo de manera muy complicada para mí, pero exponiendo una realidad que era obvia. Yo les ofrecí que cuando quisieran debatimos y prefirieron no hacerlo”, relató el martes 21 de setiembre. El mismo día en el que se conoció una petición, a través de Change.org, donde ya se sumaron más de 430 personas que dicen estar organizándose para iniciar acciones legales.

“Una ya tiene unas 150 denuncias. Y muchas son de personas de Mendoza. Esto es una estafa que perjudica a miles de personas. Y el caso se centra en Mendoza porque ellos son los primeros que dejaron de pagar. Porque estaban pagando en otros lados pero en Mendoza no. Eso los puso en el foco de la tormenta. Estaban empezando a armar en ese momento Our Ranch en Chile y fue el momento en el que hice la primera advertencia. Hoy ya han dicho que no pagan más bajo el argumento de que todo era una especie de apuesta que podría haber salido mal”, informó.

La sorpresa para Sanz radica en el hecho de al momento de haber consultado a los burlados “nadie me sabía explicar quién recibía esa plata. Que era todo por medio de una plataforma y que en ningún momento sabían quién estaba detrás de la maniobra. Cuando les pregunté si no sabían a quién les estaban poniendo ese dinero me respondieron que sí, que no lo sabían. Eso fue peor todavía porque al no saber quién los estafó les será muy difícil denunciarlo. Pero yo lo sé porque lo investigué. Que son Terán, Corriols y demás. Los mismos que ahora les están proponiendo a la gente que pongan plata en otras plataformas nuevas que están armando”.

En el caso puntual de la amenaza “después el flaco me pidió disculpas, me dijo que no había ido a pelear, lo cual es mentira porque es un violento, tiene una causa que le inició una mujer. Pero en definitiva no me gusta nada lo que hacen. Cuando me fue a buscar, los testigos me dijeron que el flaco estaba como loco. Que estaba encapuchado, eso me llamó la atención. Que solamente se le veían los ojos. Y cuando le pregunté porqué me había ido a buscar con un pasamontañas puesto me contestó que lo había hecho porque tenía frío. Ese diálogo fue abierto porque lo hicimos a través de Twitter. Una locura. Me contaron que había ido a los gritos, que quería romper todo. Y después me enteré que es quien va a apretar a la gente que se queja”, relató refiriéndose a Fader.

Respecto a Terán, contó que “tiene muchos expedientes en su contra de diferentes delitos. Especialmente denunciando situaciones relacionadas con la pedofilia. Cuando alguien los cuestionan te tratan de pedófilo. Pero particularmente hubo un caso muy sonado en Mendoza que lo llevó adelante la abogada Carolina Jacky. Incluso los han desalojado del local que tenían porque no pagaban el alquiler. Les tuvieron que hacer un juicio de desalojo. Tienen un ADN del crimen”.

“Al momento en el que salieron a pegarme con todo me acusaron de pedófilo, que secuestraba gente y que tenía un prontuario. Una locura inverosímil y por suerte bajaron los decibeles por ahora. Lo que sucedió es que venían bien y cuando los denuncié la gente empezó a retirar dinero en masa, quedándose sin plata para seguir pagando y sin el pretexto se seguir sumando gente nueva. Desde ese momento muchísima gente me escribe preguntándome sobre el caso y se han armado grupos donde están analizando la manera de actuar legalmente. Lo mejor sería que hicieran una demanda colectiva”, aconsejó.

Y añadió: “Lo deberían hacer en una fiscalía de turno, argumentando el delito de estafa. Para eso yo me he ofrecido de testigo. En ese caso yo no puedo ser denunciante porque a mí no me han estafado. Pero sí puedo servir de testigo y explicar la manera en la que se configuró la estafa”, aseguró.