Testigo cambió su testimonio y pone en jaque la causa contra Walter Bento
Diego Barrera, sicario de Aliaga, sacudió la sala de audiencias con su nueva versión de los acontecimientos. El fiscal, Dante Vega, pidió el llamado como testigos de varios exfuncionarios y figuras de la política mendocina. Todos los detalles de un proceso que no deja de sorprender
Por Redacción
El martes pasado, en el proceso judicial contra Walter Bento y otros acusados relacionados con el magistrado, se suscitaron una serie de declaraciones que dejaron más interrogantes que certezas.
El giro de un testigo clave
Uno de los testigos clave, que había relatado y arrojado datos esclarecedores a la causa respecto al funcionamiento de la banda delictiva provincial, la cual, cobraba cuantiosas coimas en dólares e inmuebles, a cambio de favores de excarcelación a presos ligados al narcotráfico y otros delitos muy redituables, decidió refutar sus primeras declaraciones.
Diego Barrera, de 53 años, fue trasladado desde la penitenciaria federal, donde cumple una sentencia de prisión perpetua por quitarle la vida a Diego Aliaga (51), señalado como presunto orquestador del emporio delictivo de Walter Bento, fue trasladado hasta la sala de debates y dejó perplejo a más de uno de los presentes, con sus nuevas afirmaciones.
El sicario se contradijo de toda la versión original de los hechos, que durante la etapa de instrucción defendió como prueba fiel de lo acaecido y señaló directamente al fiscal del caso, Dante Vega, a su ex abogado Antonio Carrizo y a referentes políticos del peronismo-kirchnerismo local, como articuladores de un complot en contra del ex juez federal.
Barrera sostuvo que fue coartado, sin descanso, por los antedichos para que ubicara al exjuez en el centro de la escena del entramado delictivo. En este contexto, y ante el nuevo testimonio, las autoridades judiciales intervinientes, solicitaron que varias personas sean llamadas como testigos para darle asidero o desmentir esta versión, que dejó boquiabiertos a varios de los que la oyeron.
Ayer, miércoles, continuó la testimonial de Diego Barrera, pero con el hecho curioso de que ninguna de las partes implicadas, ni la Fiscalía ni los abogados defensores, quisieron interrogarlo, y profundizar en los detalles de su reformulada declaración.
Llamados a declarar
Lo que sucedió a continuación, fue que el fiscal federal Dante Vega hizo uso de la palabra y solicitó que en la próxima audiencia sean citados a declarar todas las personas que Diego Barrera mencionó en su declaratoria.
En concreto, Barrera, mencionó a su ex abogado Antonio Carrizo, el exministro de Seguridad provincial, Leonardo Comperatore, el ex vicegobernador, Carlos Ciurca, a la senadora nacional, Anabel Fernández Sagasti. También, los letrados María Elena Quintero y Maximiliano Legrand, los fiscales de la Justicia provincial Carlos Torres y Andrea Lazo, el director del Servicio Penitenciario, Eduardo Orellana, por nombrar a algunos.
Nuevas estrategias
Es de esperarse que la movida de reacomodamiento de la Fiscalía Federal, girará en torno a que estos indicados declaren y desmientan todo lo que manifestó, a lo largo de las últimas jornadas, Diego Barrera, sobre el armado infundado de una causa contra Walter Bento, las torturas carcelarias y los aprietes políticos/judiciales que habría sufrido el malviviente.
En la vereda de enfrente, la estrategia de los abogados defensores será que la causa en curso fue armada contra el magistrado por cuestiones netamente asociadas a disputas en el poder político, y aprovecharán las nuevas declaraciones de Barrera como punta de lanza para lograr un pronunciamiento de la cámara que favorezca ampliamente a Walter Bento.