Patriot: capacidad y precio de los supermisiles para Ucrania

El sistema de defensa aérea Patriot vuelve a estar en el foco de la atención internacional, tal cual lo hiciera en la Guerra del Golfo cuando cobró notoriedad resguardando el espacio aéreo de Israel.

Creación y desarrollo

Este ingenio bélico se desarrolló a principios de los años sesenta, pero recibió su denominación y diseño actual una década más tarde. Las fuerzas armadas estadounidenses empezaron a utilizar este equipo, donde una sola batería consta de varios radares, unidades de mando y control y diversas lanzaderas interceptoras de misiles, en la década de 1980.

El fabricante de armas estadounidense Raytheon produce el sistema Patriot y lo modernizó varias veces a lo largo de los años. La empresa afirma que tiene previsto seguir actualizándolo, tentativamente, hasta 2048. En su versión actual, puede usarse contra misiles nucleares tácticos, misiles de crucero de vuelo rasante, drones, aviones y "otras amenazas" que la corporación que lo patenta no especifica.

Alcance y capacidades

Los proyectiles y naves que el sistema Patriot puede interceptar son parte del arsenal que Rusia utiliza contra Ucrania. La efectividad probada de estas baterías es el fundamento de Kiev para hacerse de ellos. Sin embargo, Moscú también utiliza aeronaves más pequeñas, como minidrones, que vuelan muy cerca del suelo y resultan más difíciles de rastrear e interceptar para el ingenio estadounidense.

Según sus especificaciones, su radar puede detectar hasta 50 objetivos y atacar cinco de ellos simultáneamente. De acuerdo al modelo en uso, los misiles interceptores pueden llegar a una altura de más de dos kilómetros y alcanzar objetivos a una distancia de hasta 160 kilómetros. Pese a esto, a menudo se necesitan varios interceptores Patriot para destruir un solo misil, por lo que el sistema es evidentemente costoso.

Según el grupo de estudios en defensa estadounidense “Center for Strategic and International Studies”, se necesitan unos 90 soldados para operar cada batería de forma completamente eficaz.

Despliegue y alto costo

El sistema defendió a las tropas estadounidenses y a sus aliados, así como a las zonas pobladas del Estado judío, contra los misiles “Scud” iraquíes. El proyectil continuó su evolución y posteriormente se utilizó en la guerra de Irak de 2003.

El enorme costo del sistema es su crítica más marcada. Por ejemplo, la primera adquisición de Patriot en Polonia costó, aproximadamente, 4.600 millones de euros, más de una cuarta parte del presupuesto total de defensa del país previsto para 2023. Una sola prueba de interceptación puede costar hasta 100 millones de dólares, según el grupo estadounidense de investigación en defensa “RAND”.

Analistas consideran que la primera batería de Patriot podría llegar a Ucrania en febrero de 2023. Se calcula que una sola batería cuesta más de 1.100 millones de dólares: 400 millones corresponde a los lanzadores, el módulo de mando y el radar y alrededor de 700 millones para los misiles interceptores. Cada proyectil de la versión PAC-3, la más moderna y la única que Washington adquiere en la actualidad, cuesta unos USD 4.1 millones.