OpenAI busca crear una IA más inteligente que un humano

¿Qué pasaría si una inteligencia artificial fuera más inteligente que un humano? Esta es la pregunta que se plantean los creadores de ChatGPT, un modelo de lenguaje basado en IA que busca alcanzar la llamada Súper Inteligencia Artificial. Sin embargo, este ambicioso objetivo también implica un gran riesgo: que la IA se vuelva contra el ser humano.

Así lo han advertido Ilya Sutskever y Jan Leike, cofundador y codirector del nuevo equipo de OpenAI, la compañía responsable de ChatGPT. Según ellos, no existe una forma de controlar o dirigir a una IA potencialmente superinteligente que pueda rebelarse contra sus creadores. Por eso, necesitan desarrollar nuevos avances que les permitan supervisar y alinear a estos sistemas con los valores humanos.

Para lograrlo, el equipo liderado por Leike tiene como meta construir un investigador de alineación automatizada a nivel humano, una herramienta que entrenaría a la inteligencia artificial para que respete los principios éticos y morales de la humanidad y evite que la Súper Inteligencia Artificial se convierta en una amenaza. 

Aunque parezca una escena sacada de una película de ciencia ficción, lo cierto es que la posibilidad de una Súper Inteligencia Artificial no está tan lejana. OpenAI estima que podría alcanzarse hacia finales de esta década, si se cuenta con las herramientas adecuadas para controlar sus capacidades. Por eso, es importante estar preparados y evitar que se repita el escenario distópico que tantas veces han pronosticado los expertos tecnológicos.

Regulaciones para la IA

No sólo se trata de garantizar su seguridad y su fiabilidad, sino también de preservar su beneficio social y su respeto por los derechos humanos, por eso, OpenAI trabaja incansablemente para crear una herramienta alineada con los intereses humanos, así, esperan contribuir a un futuro mejor para todos, en el que la IA sea una aliada y no una enemiga.