La Cámara de Diputados de Mendoza inició este lunes el plenario de comisiones para analizar la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del megaproyecto Malargüe Distrito Minero Occidental II (MDMO II). Sin embargo, la jornada, encabezada por la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre, quedó marcada por la fuerte oposición de grupos ambientalistas, reactivando un debate histórico en la provincia.
La ministra Latorre destacó que este paso es "central para ordenar, transparentar y potenciar la exploración minera" en el sur, buscando una "ventana histórica para ampliar la matriz productiva" de Mendoza por los próximos 50 o 100 años.
La clave: La exploración en la zona periglacial
Uno de los puntos que genera mayor controversia es la actualización de la normativa ambiental que introduce la DIA de MDMO II. La provincia, en colaboración con Nación e IANIGLA, está trabajando en una guía de referencia para zonas periglaciales, áreas sensibles de alta montaña que son vitales para la regulación del agua.
Latorre explicó que, ante la falta de un inventario nacional de periglaciar, se está construyendo uno con "criterios técnicos consensuados y estrictos". Aclaró que esto no implica "perforar en zonas sensibles", sino que permite ingresar a "relevar información científica que antes no se podía obtener". El Gobierno busca que el acceso ordenado a este distrito minero (que abarca 18.000 km²) sirva para "conocer mejor y proteger mejor", al tiempo que atrae financiamiento y genera desarrollo.
Actualmente, la DIA incorpora el análisis de 27 proyectos, sumándose a 34 previos, y se evalúan otros 71 nuevos que ingresaron recientemente.
El conflicto se traslada a la calle: abucheos a la Ministra Latorre
La presentación oficial en la Legislatura no pudo contener el rechazo social. Tras retirarse de la reunión, la ministra Jimena Latorre fue abucheada por un grupo de manifestantes antimineros, alineados con la Asamblea por el Agua, en las inmediaciones de la Casa de las Leyes.
Los manifestantes siguieron a la ministra por calle Espejo hasta Patricias con cánticos de protesta, haciendo resonar la histórica consigna mendocina: "el agua de Mendoza no se negocia". Este suceso subraya la persistencia de los grupos que se manifiestan contra este tipo de iniciativas en la provincia, que temen un impacto ambiental irreversible. La ministra finalmente se retiró del lugar, mientras el debate legislativo continúa en medio de una marcada tensión social.
