Chaco
Este domingo al mediodía, la tranquilidad del pueblo de Margarita Belén, en Chaco, se vio interrumpida por una escena que parecía sacada de una película de acción. Alrededor de las 11:30, un grupo de encapuchados secuestró a un joven y lo subió a una camioneta blanca, generando pánico entre los vecinos que fueron testigos del suceso. Inmediatamente, las alarmas se encendieron y la policía local fue alertada sobre lo que parecía ser un secuestro a plena luz del día.
El hecho, que inicialmente parecía un crimen grave, terminó siendo una broma para una despedida de soltero que salió mal. Sin embargo, antes de que los implicados pudieran aclarar la situación, se desató un amplio operativo policial.
Las cámaras de seguridad de la zona mostraron lo que parecía un secuestro bien organizado. El joven, que luego se supo era el futuro esposo, fue visto maniatado y encapuchado en la caja de una Volkswagen Amarok, cerca del Club Municipal. La camioneta estaba acompañada por tres vehículos: una moto conducida por un hombre con pasamontañas, un Renault Logan negro y una camioneta Renault Kangoo gris. Todo formaba parte de un montaje planeado por los amigos del novio para sorprenderlo.
Cuando la policía revisó las grabaciones y ante la gravedad de lo que parecía un secuestro real, se activó un operativo cerrojo. El vehículo fue localizado en una quinta sobre la calle Carpintero, donde se escuchaban gritos desde el interior, lo que motivó una intervención inmediata por parte de los uniformados.
Al ingresar, los agentes encontraron a siete hombres, incluido el novio, quienes rápidamente confesaron que el supuesto secuestro era una broma para la despedida de soltero de Lucas Sergio R., de 33 años. Los detenidos fueron identificados como G. B. (33), L. R. (24), L. D. (30), L. V. (26), M. V. (30) y F. S. (28).
A pesar de las aclaraciones, la policía detuvo a los siete hombres, quienes fueron notificados por infringir el artículo 56 del Código de Faltas, que regula las conductas que alteran el orden público. El fiscal Francisco De Obaldía Eyseric tomó el caso y lo derivó al Juzgado de Faltas local.
Finalmente, tras algunas horas en la comisaría, los implicados fueron liberados. La situación, que generó preocupación y temor entre los vecinos de Margarita Belén, no fue más que una broma de mal gusto, pero dejó claro que no todas las ideas para despedidas de soltero son bien recibidas por la comunidad.
