¿Cómo se transformó un beeper en una bomba?

Los beepers o buscapersonas, dispositivos que alcanzaron su popularidad en los años 80 y fueron desplazados por la llegada de los teléfonos celulares en los 90, siguen siendo utilizados en áreas con mala cobertura telefónica o en ambientes como hospitales donde los equipos médicos son sensibles a interferencias. 

Sin embargo, este martes, un ataque en el Líbano reveló el oscuro potencial de estos dispositivos, -que estaban en posesión de miembros del grupo Hezbollah- en una serie de explosiones masivas que causaron la muerte de al menos 9 personas y más de 2.800 heridos.

El ministro de Telecomunicaciones del Líbano, Johanny Corn, confirmó que el cargamento de estos beepers había ingresado recientemente al país, lo que alimenta la hipótesis de que fueron modificados con explosivos antes de llegar a manos del grupo.

Aún se investigan los detalles exactos, pero Corn no descartó la posibilidad de que las detonaciones hayan sido activadas de forma remota, tal vez a través de un ciberataque o la manipulación de las baterías de los aparatos, las cuales se sobrecalentaron antes de explotar.

Beepers y detonación remota: una hipótesis plausible

Los expertos están evaluando diferentes teorías sobre cómo estos beepers se convirtieron en armas letales. Una de las más probables es que el cargamento fue interceptado antes de llegar a Líbano, y que un explosivo fue insertado junto a la batería de cada dispositivo. La detonación remota podría haberse logrado enviando un mensaje falso que, al ser recibido y activado, detonó el explosivo.

El grupo Hezbollah admitió que los beepers pertenecían a sus miembros, pero aún no logran esclarecer qué provocó las explosiones simultáneas en distintas áreas del sur del Líbano, donde el grupo tiene presencia. Según algunos informes, antes de las explosiones, los dispositivos emitieron un pitido, lo que indicaría una activación coordinada de los explosivos. 

¿Cómo se transformó un beeper en una bomba?

Los beepers, que fueron la primera herramienta de comunicación portátil antes de la era de los celulares, funcionaban a través de ondas de radio, lo que los hace menos susceptibles a interceptaciones convencionales. Sin embargo, su diseño básico y la simplicidad en su sistema de transmisión de mensajes cortos parecen haber facilitado la inserción de explosivos sin que los usuarios notaran ninguna diferencia en su funcionamiento hasta el momento de la explosión.

Algunos expertos creen que el ataque fue posible gracias a una infiltración en la cadena de suministro. Alex Plitsas, un especialista en armas, comentó que las imágenes de las explosiones sugieren que no se trataba simplemente de un fallo en las baterías, sino de una pequeña carga explosiva. Esto refuerza la hipótesis de que los dispositivos fueron manipulados antes de llegar a los agentes de Hezbollah.

Por su parte, Paul Christensen, experto en seguridad de baterías de iones de litio, expresó dudas de que una falla de batería haya sido suficiente para causar explosiones tan destructivas. Esto propone que el incidente fue mucho más complejo que una simple falla técnica, y más cercano a una operación de sabotaje sofisticado.

¿Un celular puede ser empleado cómo una bomba?

Sí, un celular puede ser utilizado como bomba. De hecho, hay precedentes de este tipo de uso en ataques terroristas, donde los dispositivos móviles sirven tanto como detonadores remotos como parte del mecanismo explosivo.

Al igual que los beepers, los celulares se pueden manipular para detonar explosivos mediante una llamada, un mensaje de texto, o incluso una aplicación que se active a distancia. 

El principio detrás de esto es similar al de los ataques con beepers en el Líbano: los dispositivos electrónicos, que envían señales a través de ondas, pueden ser modificados para actuar como detonadores una vez que reciben una señal o activan una función específica.

Por ejemplo, en varias partes del mundo, incluidos conflictos en Medio Oriente, los celulares han sido empleados como herramientas de activación para artefactos explosivos improvisados (IEDs). Al recibir una llamada o mensaje, el celular puede enviar una señal que cierra un circuito eléctrico y detona un explosivo al que está conectado.

Infiltración en la logística de Hezbollah

Fuentes cercanas a Hezbollah indicaron que el cargamento de mil beepers había sido adquirido recientemente por la organización, y que los dispositivos podrían haber sido pirateados en origen. Esta sería una infiltración en la cadena logística del grupo, posiblemente por parte de los servicios de inteligencia israelíes, quienes han demostrado en el pasado su capacidad para realizar operaciones encubiertas y sabotajes a gran escala.

El ataque a través de beepers modificados representa una evolución en el uso de la tecnología en el terrorismo, demostrando cómo incluso dispositivos obsoletos pueden transformarse en herramientas de destrucción cuando son manipulados por expertos en ciberataques y explosivos.

La investigación continúa

A medida que avanza la investigación, las autoridades libanesas y Hezbollah siguen intentando desentrañar cómo los beepers, aparentemente inofensivos, fueron utilizados en este ataque coordinado. 

El incidente dejó a la comunidad internacional en alerta ante la posibilidad de que esta antigua tecnología pueda ser reutilizada como arma en futuros atentados, lo que subraya la importancia de controlar y revisar la cadena de suministros de cualquier dispositivo electrónico que pueda ser vulnerable a manipulación.