|16/01/24 10:26 AM

La 'sangre de glaciar': el preocupante fenómeno climático que se está extendiendo

El color de la nieve rosa absorbe más luz solar que la blanca convencional. Especialistas advierten de que es alarmante, más allá de su belleza

Por Redacción

16 de enero, 2024 - 11:34

En las elevadas cimas de las montañas de América del Norte, un peculiar fenómeno natural llama la atención de científicos y entusiastas: la "sangre glaciar". Aunque el nombre evoca imágenes de crímenes y misterios, la explicación de este fenómeno se encuentra en la vida más que en la muerte.

Este intrigante suceso tiene como protagonista a la Chlamydomonas nivalis, un alga rosada que tiñe de tonalidades rojizas la nieve durante su floración. El pigmento carotenoide rojo presente en esta alga, similar al de vegetales como las zanahorias, le otorga su distintivo color y, al mismo tiempo, la protege de la intensa luz y radiación ultravioleta que caracterizan las grandes altitudes.

América del Norte es la región predilecta de esta singular alga, que ha colonizado aproximadamente el 5 % de la superficie total de los glaciares en áreas como Columbia Británica, Idaho, el estado de Washington, Alberta, Alaska y Montana.

Sin embargo, la proliferación de la "sangre glaciar" plantea interrogantes sobre su impacto ambiental. La presencia de este fenómeno podría relacionarse con nutrientes arrastrados por precipitaciones y vientos, pero expertos advierten que el aumento de dióxido de carbono en la atmósfera también podría estimular el crecimiento de estas algas.

Investigaciones sugieren que la nieve teñida por estas microalgas refleja la luz de manera menos eficaz que la nieve blanca, provocando un derretimiento más rápido, según un informe del 2016 publicado en la revista Nature. Eric Maréchal, director del Laboratorio de Fisiología Celular y Vegetal en Grenoble, Francia, advierte sobre un posible efecto de ‘bola de nieve’ perjudicial en el ecosistema circundante.

A pesar del interés generado por este fenómeno, la falta de mediciones y estudios sistemáticos impide a los científicos determinar si la "sangre glaciar" está en aumento y su posible vinculación con el cambio climático. Para abordar estas incertidumbres, Maréchal y su equipo han lanzado el proyecto AlpAlga, destinado a investigar las microalgas en las zonas montañosas.

Este extraño evento climático, más allá de su fascinación, plantea un riesgo potencial para los glaciares en diversas regiones del planeta. La denominada "Nieve de Sandía" podría convertirse en un indicador crucial, alertando sobre cambios en el entorno natural que merecen una atención cuidadosa. La comunidad científica, con proyectos como AlpAlga, busca desentrañar los misterios de la "sangre glaciar" y comprender su significado en el panorama ambiental global.

El color rosa de la nieve rosa absorbe más luz solar que la nieve blanca convencional. Esto significa que se calienta más rápidamente, lo que acelera el deshielo del glaciar.

El deshielo de los glaciares puede tener consecuencias devastadoras para los ecosistemas y las comunidades que dependen del agua de deshielo para su suministro. Los glaciares proporcionan agua dulce para el consumo humano, la agricultura y la industria. Su deshielo puede provocar escasez de agua, inundaciones y cambios en los ecosistemas.