¿Puede ser perjudicial para la salud si no desayunamos?

Realizar dieta puede tener un gran impacto en la salud humana, al igual que como comer en exceso afecta su inmunidad y metabolismo, aumentando su riesgo de enfermedad, la restricción calórica y el ayuno no parecen ser tan beneficioso como podría pensar.

El ayuno puede ser perjudicial para combatir infecciones y aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca, según un nuevo estudio realizado por investigadores de la Escuela de Medicina Icahn de Mount Sinai.

Los resultados, que fueron publicados el 23 de febrero en Immunity, muestra que la investigación se centró en un modelo de ratón y fue uno de los primeros en mostrar que saltarse una comida puede desencadenar una respuesta cerebral que afecta negativamente a las células inmunitarias.

Según los responsables de realizar la investigación, sus resultados pueden conducir a una mejor comprensión de cómo el ayuno crónico puede afectar el cuerpo a largo plazo "Identificamos cambios inducidos por el ayuno en la migración de leucocitos que extendieron la vida útil de los monocitos y alteraron la susceptibilidad a la enfermedad en ratones".

"Mostramos que el ayuno durante la fase activa induce un rápido retorno de los monocitos de la sangre a la médula ósea". En este estudio, los investigadores buscaron comprender mejor cómo el ayuno el afecta sistema inmune, desde ayunos relativamente breves de unas pocas horas hasta ayunos más intensos de 24 horas.

El estudio

Para ello, analizaron dos grupos de ratas. Un grupo desayunaba al despertar y el otro no. Los investigadores recolectaron muestras de sangre de ambos cuando las ratas se despertaron, 4 horas después y 8 horas después. Cuando se revisen los resultados de laboratorio, encontraron una clara diferencia en el grupo en ayunas.

Específicamente, los investigadores observaron las diferencias en la cantidad de monocitos, glóbulos blancos que se forman en la médula ósea y viajando por todo el cuerpo. Los monocitos realizan muchas funciones importantes, desde combatir infecciones hasta enfermedades cardiacas y cáncer.

Filip Swirski es el autor principal del estudio, Ph.D., y director del Instituto de Investigación Cardiovascular en Icahn Mount Sinai, y remarcó que “cada vez hay más conciencia de que el ayuno es saludable y, de hecho, existe abundante evidencia de los beneficios del ayuno”, dijo el médico.

“Nuestro estudio ofrece una advertencia, ya que sugiere que el ayuno también puede tener un costo que conlleva un riesgo para la salud -señaló-. Este es un estudio mecánico que profundiza en parte de la biología fundamental relevante para el ayuno. El estudio muestra que existe una conversación entre los sistemas nervioso e inmunológico”.

El trabajo es uno de los primeros en establecer la conexión entre el cerebro y estas células inmunitarias durante el ayuno. Los investigadores encontraron que regiones específicas del cerebro controlaban la respuesta de los monocitos durante el ayuno, por lo que dedujeron que “el ayuno provoca una respuesta de estrés en el cerebro, eso es lo que hace que las personas tengan hambre, lo que desencadena instantáneamente una migración a gran escala de estos glóbulos blancos de la sangre a la médula ósea, y luego regresa al torrente sanguíneo poco después de que se reintroduce la comida”.

Y si bien Swirski enfatizó que también hay evidencia de los beneficios metabólicos del ayuno, destacó que este nuevo estudio es un avance útil en la comprensión completa de los mecanismos del cuerpo.

“El estudio muestra que, por un lado, el ayuno reduce la cantidad de monocitos circulantes, lo que podría pensarse que es algo bueno, ya que estas células son componentes importantes de la inflamación. Por otro lado, la reintroducción de alimentos crea un aumento repentino de monocitos inundando de nuevo a la sangre, lo que puede ser problemático”, concluyó.