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Los papás son más viejos que las mamás desde tiempos ancestrales

Científicos utilizaron el ADN humano moderno para estimar, cuándo nacieron las nuevas generaciones en los últimos 250.000 años. Determinaron la edad promedio de los padres y madres al momento de la concepción

Por Redacción

27 de enero, 2023 - 12:41

Los científicos descubrieron una nueva forma de identificar las edades promedio en que los hombres y las mujeres se reprodujeron a lo largo de la historia evolutiva humana.

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Al estudiar las mutaciones del ADN en los humanos modernos, dieron con una pista que les permitió observar un patrón que data de 250.000 años atrás.

"A través de nuestra investigación en humanos modernos, notamos que podíamos predecir la edad a la que las personas tenían hijos, a partir de los tipos de mutaciones de ADN que les dejaban a sus hijos", dijo el coautor del estudio Matthew Hahn, genómico de la Universidad de Indiana en Bloomington.

"Luego aplicamos este modelo a nuestros ancestros humanos para determinar a qué edad procrearon”.

Los expertos descubrieron que en los últimos 250.000 años, la edad promedio de los humanos para tener hijos fue de 26,9 años (nuestra especie data de 300.000 años atrás).

El informe determinó que el padre homo sapiens promedio, siempre ha sido mayor que la madre homo sapiens promedio.

El estudio indicó que los hombres se convierten en padres a los 30,7 años, mientras que las mujeres lo han hecho a los 23,2 años.

Otro dato importante que se desprendió de la investigación, fue que la diferencia de edad se redujo en los últimos 5.000 años, ya que las mujeres tuvieron hijos a los 26,4 años de edad en promedio, es decir, casi cuatro años más grandes que sus antecesoras.

Gracias a tecnologías de secuenciación genómica, bancos genéticos y rastreo de mutaciones, los especialistas llegaron a conclusiones verdaderamente llamativas.

Sin embargo, aparte del reciente aumento en la edad materna, el estudio encontró una notable consistencia en la edad promedio de los nuevos padres a lo largo de la existencia de nuestra especie. Es decir, que esta no ha aumentado constantemente desde la prehistoria y continúa fluctuando dentro de los mismos parámetros con el paso del tiempo.

Gracias a tecnologías de secuenciación genómica, bancos genéticos y rastreo de mutaciones, los especialistas llegaron a conclusiones verdaderamente llamativas como, por ejemplo, que la edad promedio de concepción parece haber caído hace unos 10.000 años, lo que coincidiría el con el advenimiento de la agricultura y los albores de la civilización. Los investigadores dicen que podría estar relacionado con el rápido crecimiento de la población en ese momento.

 

Rastreador de mutaciones

La historia registrada solo se remonta a unos pocos miles de años en el mejor de los casos, y la información amplia a nivel de población, es muy difícil de obtener y solo se logra mediante evidencia arqueológica.

Pero los ‘secretos’ de nuestros antepasados también se encuentran dentro del humano moderno, es decir de cada uno de nosotros y es como Hahn y sus colegas, descubrieron la forma de determinar la edad de los padres ancestrales.

Todos los niños tienen nuevas mutaciones que sus padres no tienen. Estas mutaciones surgen cuando el ADN se daña antes de la concepción o debido a errores aleatorios durante la división celular. La investigación sugiere que los padres mayores transmiten más mutaciones que los padres más jóvenes, con diferencias entre hombres y mujeres.

Wang y sus colegas utilizaron un software para analizar los datos de un estudio de alrededor de 1.500 islandeses y sus padres para rastrear la edad de concepción y los cambios genéticos entre las generaciones. El programa aprendió a asociar ciertas mutaciones y sus frecuencias con la edad y sexo de los padres. Luego, el equipo aplicó el modelo recién entrenado a los genomas de 2.500 personas modernas que viven en todo el mundo, para identificar mutaciones que surgieron en varios puntos de la historia humana.

El resultado permitió a los investigadores estimar tiempos separados de generación masculina y femenina a lo largo de 250.000 años.

"Estas mutaciones del pasado se acumulan con cada generación y existen en los humanos hoy en día", dice el coautor del estudio y filogenético de la Universidad de Indiana, Richard Wang.

"Ahora podemos identificar estas mutaciones, ver cómo difieren entre los padres masculinos y femeninos, y cómo cambian en función de la edad de los padres".

Las investigaciones anteriores también utilizaron pistas genéticas para estimar la duración de la generación a lo largo del tiempo, pero generalmente se basaron en comparaciones entre el ADN moderno y muestras antiguas que se promediaron entre sexos y en los últimos 40.000 a 45.000 años, señalaron los investigadores.

"La historia de la humanidad se compone de un conjunto diversas fuentes: registros escritos, hallazgos arqueológicos, fósiles, etc.", dijo Wang.

"Nuestros genomas, el ADN que se encuentra en cada una de nuestras células, ofrecen una especie de manuscrito de la historia evolutiva humana”, destacó el investigador.

“Los tiempos de generación más largos para los hombres pueden explicarse generalmente por el hecho de que los hombres son biológicamente capaces de tener hijos más tarde que las mujeres, lo que aumenta la edad promedio de paternidad”, dijo Richard Wang.

"Los hallazgos de nuestro análisis genético confirman algunas cosas que sabíamos de otras fuentes, pero también ofrecen una comprensión más rica de la demografía de los humanos antiguos", cerró coautor del estudio y filogenético de la Universidad de Indiana.

 

Presión social

“El hallazgo también podría apuntar a factores sociales”, dijo Mikkel Schierup, genetista de población de la Universidad de Aarhus en Dinamarca. El experto sugirió que esto puede deberse a la presión sobre los hombres en las sociedades patriarcales para construir un estatus antes de convertirse en padres.

La genetista de población Priya Moorjani de la Universidad de California, expresó que el modelo, no tiene en cuenta factores como la exposición ambiental, que podría determinar cuándo aparecen las mutaciones. “Esto significa que las mutaciones con diversas causas podrían atribuirse injustamente a la edad de los padres, lo que podría sesgar los resultados de estudios como este”, opinó la especialista.

El estudio fue publicado en Science Advances.