Asesinato
Los hechos son los siguientes, según la investigación que lleva adelante la fiscal María del Valle Durán: la policía Marina Silva mató a sus hijos Sofía (7) y Bautista (2), en la madrugada del martes 1 de octubre, mientras dormían en la cama que compartían, según informó la Fiscalía de Instrucción N°4 del Poder Judicial de la provincia de San Luis.
El crimen y los primeros indicios
Los hechos ocurrieron entre las 5 y las 6 de la mañana, cuando Silva habría puesto las almohadas sobre las cabezas de los niños y les habría disparado con su arma reglamentaria.
A las 7, dejó dos carteles en su vivienda: uno en la puerta trasera con la frase "no entres" y otro en la puerta delantera, dirigido a su hermana, que indicaba "Melina llama a la Policía, no entres" (SIC). Además, envió un mensaje en el grupo de WhatsApp familiar pidiendo perdón por lo que había hecho.
Los detalles proporcionados por la Fiscalía indican que la madre, que atravesaba una muy difícil crisis económica, justificó el asesinato aludiendo que" no quería dejar a sus hijos como una carga para nadie".
En un cuaderno escolar de Sofía, Silva dejó una nota despidiéndose de sus padres, hermanos y del padre de su hijo menor, Bautista. El padre de la niña vive en Buenos Aires y no tuvo contacto reciente con la familia.
El hallazgo de los cuerpos
Según publicaron medios locales, el comisario Diego Albornoz, de la División Homicidios, fue quien notificó a la Fiscalía sobre los cuerpos sin vida de los niños en la casa de barrio Los Fresnos. La fiscal María Durán y un equipo forense se trasladaron al lugar para comenzar las investigaciones.
Personal de la Policía Científica y de la División Homicidios recolectó pruebas que apuntan a Silva como la única responsable del doble homicidio.
Silva fue encontrada a un costado del dique Cruz de Piedra, llorando y en estado de shock. La policía la condujo a la Comisaría de Atención a la Niñez, Adolescencia y Familia (CANAF), donde manifestó en repetidas ocasiones que quería suicidarse.
Asimismo, trascendió que la acusada había arrojado su teléfono a un lago cercano antes de ser capturada.
El contexto detrás del crimen
Horas antes del crimen, Silva había estado con su hermana, quien vive en una casa en el mismo terreno. Tras una noche tranquila, cada una se retiró a su hogar, y Silva mantuvo comunicación hasta la medianoche con el padre de Bautista.
Los investigadores revelaron que la situación financiera de Silva y sus deudas habrían sido el detonante de la tragedia. Información que fue confirmada por su padre, en el que indicó que la joven "le debía plata a todo el mundo".
El Ministerio de Seguridad de San Luis informó que Silva no estaba bajo tratamiento psicológico ni tenía carpeta médica. Según sus compañeros, la subinspector estaba activa dentro de la Policía, no estaba bajo ningún tipo de tratamiento psicológico y tampoco cursaba carpeta médica y debía retomar su trabajo el día del crimen tras su franco.
La Fiscalía se prepara para presentar los cargos contra Silva en las próximas horas. Mientras tanto, la comunidad de Juana Koslay sigue conmocionada por el brutal asesinato de los dos menores.
Duelo escolar
La pequeña Sofía asistía a la escuela Bartolomé Mitre de Juana Koslay, ubicada en San Roque, institución que declaró duelo para esta jornada.
"Señores padres: por razones de público conocimiento, mañana, por este miércoles, la escuela estará de duelo. Por estas circunstancias no hay clases. Pedimos acompañar desde la oración y el credo que cada uno tenga a estas criaturas que ya no están entre nosotros", comunicó la dirección del establecimiento.