Detuvieron al líder de una banda de explotación sexual
La investigación se inició por la denuncia de una de las víctimas, quien contó que habían varios prostíbulos en la Ciudad y se movían para no ser descubiertos
Por Redacción
Un hombre fue detenido en el barrio porteño de Barracas por ser el presunto cabecilla de una banda dedicada a la explotación sexual, que se encargaba de conseguir clientes a través de WhatsApp, según informaron fuentes policiales a Télam.
El sospechoso fue arrestado este viernes por la tarde cuando caminaba por Avenida Regimiento Patricios y calle Aráoz de Lamadrid, luego de una investigación previa y el seguimiento de contactos telefónicos.
El personal de la División Capturas y Prófugos de la Policía de la Ciudad fue requerido por el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 1, a cargo de Andrés Lijo, para llevar a cabo tareas de investigación que logren dar con el paradero y posterior detención del acusado.
La causa se inició tras la denuncia de una mujer, quien informó sobre el funcionamiento de varios prostíbulos en el ámbito de la Ciudad. De acuerdo a su testimonio, cambiaban de lugar periódicamente para no ser descubiertos.
Estos lugares eran administrados por al menos cinco personas, pero tenían como jefe al hombre buscado por la Justicia, y ofrecían servicios sexuales de mujeres, entre ellas la denunciante.
El prófugo era quien se encargaba del funcionamiento de los prostíbulos y conseguía los clientes a través de páginas de Internet y WhatsApp.
Por su parte, la víctima indicó que de las tarifas cobradas por los encuentros sexuales, la organización se quedaba con la mitad del dinero, lo que las llevaba a trabajar durante más tiempo para poder obtener ganancias.
Gracias al material aportado por la denunciante durante la investigación, se verificó la explotación que sufrían las mujeres. Como consecuencia, con todos los elementos recabados, se determinaron dos posibles domicilios en los que podría estar el criminal.
Finalmente los efectivos se apostaron en las inmediaciones de las viviendas de forma encubierta y establecieron que en una de las propiedades residía la hermana del acusado.
Así mantuvieron una charla con la mujer, que aseguró no tener relación con su hermano, pero accedió a colaborar en la búsqueda del fugitivo. En tanto, el Magistrado interventor avaló lo actuado por el personal policial y ordenó el traslado del hombre.