Informe oficial
El Gobierno de la provincia de Santa Fe difundió este jueves un informe elaborado por la Secretaría de Política Criminal y Derechos Humanos en conjunto con las divisiones de Informaciones de las 19 unidades regionales de la Policía de ese Estado provincial, referido a la cantidad de homicidios dolosos ocurridos en los primeros nueve meses de este año.
En el documento se analiza el periodo transcurrido entre el 1° de enero y el 25 de septiembre, durante el cual hubo 132 homicidios dolosos -la cifra más baja de homicidios en una década- y, de ellos, el 76% de los casos (70) ocurrió en Rosario y en la Capital provincial (30),
Según el informe en cuestión, "en esos primeros nueve meses, el año con el mayor registro de muertes violentas fue 2014, con 326 hechos dolosos. Luego, siguen los años 2022 y 2023, con 308 y 302 casos, respectivamente".
Este resultado alentador fue celebrado por las autoridades provinciales, dado que representa una baja del 43,7% respecto del año anterior, aunque sostienen que siguen con el ojo puesto en la inseguridad y el narcotráfico.
Un buen diagnóstico
Refiriéndose a las cifras que se van reduciendo, el secretario de Análisis y Gestión de la Información del Ministerio de Justicia y Seguridad, Esteban Santantino, indicó que disminuyó la tenencia de armas de fuego, "bajó considerablemente la participación de los varones, se redujeron los homicidios en la vía pública y la cantidad de homicidios en contexto de criminalidad, delito organizado y economías ilegales. Estos son indicadores que nos permiten mejorar el diagnóstico para tomar mejores decisiones".
Por su parte, la secretaria de Gestión Institucional, Virginia Coudannes, expresó que "todos los dispositivos de prevención que hoy están funcionando en las calles tienen que ver con esta baja de los delitos, a través del trabajo de la Policía y de la Intervención Barrial Focalizada (IBF) en el territorio, donde las distintas áreas del Estado trabajan de manera articulada".
El programa IBF en las ciudades más conflictivas de la provincia es una iniciativa conjunta de esta cartera con el Ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano, el Ministerio Publico de la Acusación y los gobiernos locales, a través de la cual se articulan acciones tendientes a la prevención del delito y la disminución de la violencia urbana y la criminalidad en los barrios más conflictivos, mediante una combinación de medidas de seguridad, sociales y urbanísticas.
En ese sentido, el informe destaca que desde la implementación del IBF en los barrios más violentos, se produjo una disminución de casos al punto de no haberse registrado homicidios en las últimas semanas en las zonas intervenidas.
Finalmente, el director de Política Criminal del MPA, Augusto Montero, señaló que "si bien los indicadores que observamos son alentadores, tenemos que seguir trabajando con la misma cautela para abordar esta problemática".
Con información de Noticias Argentinas