Siguen las muertes
La guerra en Palestina sigue sumando víctimas en una franja devastada y en unas condiciones humanitarias flagrantes. Ahora, al menos 42 personas murieron el sábado, tras los ataques que llevó a cabo el ejército israelí contra distritos de la Ciudad de Gaza, puntualmente en el norte del enclave palestino, según informó el director de la oficina de medios de comunicación del gobierno dirigido por Hamás.
El ataque israelí fue contra varias construcciones en Al-Shati, uno de los ocho campos de refugiados históricos de la Franja de Gaza, y mató a 24 personas, mientras otros 18 palestinos murieron en un ataque contra casas del barrio de Al-Tuffah.
Muy escueto fue el mensaje de las Fuerzas de Defensa de Israel, que emitieron un breve comunicado en el que indicaron que "hace un momento, aviones de combate de las FDI atacaron dos emplazamientos de infraestructura militar de Hamás en la zona de la ciudad de Gaza". Agregó que pronto se conocerán más detalles.
Desde el lado de Hamás afirmaron en un comunicado que los ataques iban dirigidos contra la población civil y prometió que "la ocupación y sus líderes nazis pagarán el precio de sus violaciones contra nuestro pueblo". A la vez, imágenes obtenidas por la agencia Reuters mostraron a decenas de palestinos corriendo en busca de víctimas entre las casas destruidas en el campo de refugiados de Shati.
Los ataques tras más de ocho meses de guerra, se centran en las dos últimas zonas que sus fuerzas aún no habían tomado: Rafah, en el extremo sur de Gaza, y los alrededores de Deir al-Balah, en el centro. Y los residentes dijeron que los tanques israelíes profundizaron su incursión en las zonas occidental y septentrional de Rafah en los últimos días.
El sábado, las fuerzas israelíes bombardearon varias zonas, obligando a muchas familias que vivían en áreas calificadas como zonas designadas para la ayuda humanitaria a marcharse hacia el norte. El ejército israelí afirmó que las fuerzas continuaron con operaciones selectivas "precisas y basadas en inteligencia" en Rafah, matando a muchos pistoleros palestinos y desmantelando infraestructuras militares.
