Irán comunicó que contempla atacar Israel tras el asesinato del máximo líder político de Hamás, culpando directamente al Estado judío. La eliminación de Ismail Haniyeh en Teherán, la semana pasada, generó especulaciones y temores respecto a un importante ataque de represalia y de un conflicto general en Medio Oriente, que enfrente a Israel y Estados Unidos contra Irán y grupos aliados extremistas.
El ministro de Asuntos Exteriores iraní en funciones, Ali Bagheri, afirmó que su Gobierno va a atacar el país hebreo. Dicha decisión habría sido trasladada a su homólogo húngaro Péter Szijjártó, quien lo habría confirmado.
A su vez, el canciller magiar trasladó dichas intenciones al ministro de Exteriores israelí Israel Katz. "Irán nos ha informado de que tiene la intención de atacar Israel", confirmó Katz a medios nacionales.
"El mundo debe exigir un precio a Irán por cualquier acción agresiva que lleve a cabo", subrayó, en consecuencia, el canciller de Netanyahu.
El régimen persa afirma que Israel llevó a cabo el ataque con el apoyo de Estados Unidos y viene adelantando que tomará acciones vengativas. Tel Aviv, al día de hoy no ha dicho si estuvo involucrado, pero tampoco lo ha negado.
Mientras tanto, el ministro de Defensa de Israel dijo que el Ejército está listo para una "rápida transición a la ofensiva", en contemplación de un posible ataque iraní, tras el asesinato Haniyeh en Teherán.
Yoav Gallant, habló, este lunes, en una reunión informativa con altos oficiales de la Fuerza Aérea. "Debemos estar preparados para cualquier cosa, incluida una rápida transición a la ofensiva", expresó.