Review: Sonic Frontiers te lleva a correr por un nuevo mundo
El nuevo título del erizo más rápido de la historia intenta reinventarse para invitar a nuevos jugadores a acercarse a sus aventuras
Antes de empezar, tengo que dejar en claro una cosa: no soy un fanático de Sonic. Si bien respeto su lugar en la historia, ninguno de sus juegos me atrapó. Dicho esto, hablemos de Sonic Frontiers de Sonic Team y SEGA.
La historia
Sin hacer demasiados spoilers, todo comienza cuando Dr. Eggman descubre una tecnología antigua e intenta “hackearla”. El invento le funciona mal y termina siendo absorbido junto con Tails y Amy. Sonic logra escapar del mundo “virtual” al real por lo que una voz le explica que tiene que romper la separación entre ambos universos para salvar a sus amigos.
A correr
La primera característica de este juego es que la velocidad hace a la experiencia. Se trata de un título de mundo abierto que invita a correr rápido, recolectar anillos y encontrar cosas para hacer. Porque de eso se trata: siempre hay algo para entretenerse. Incluso las ideas que no funcionan del todo bien, invitan a probarse. Ya sea deslizarse por caños, pescar, resolver acertijos o lo que prefieras, siempre se pueden encontrar actividades para entretenerse.
El mundo abierto invita a investigar y probar, testear los límites de la velocidad y los terrenos, pero teniendo cuidado de no caer en el agua, la lava u otros elementos que son mortales para el erizo. Además, la habilidad de crear círculos de luz que luego atacan a los enemigos, se convierte en un arma más que entretenida para aprovechar la aceleración de Sonic. Eso sí, para lograr el máximo es necesario recolectar anillos, aunque se puede ir mejorando de a poco cuando se sube de nivel.
Buscando reinventarse
Está claro que Sonic busca recrearse de una manera distinta para un nuevo público. Los que vivimos la etapa 2D nos encontramos con algo distinto a lo que estábamos acostumbrados, pero para el público más joven, este 3D se adapta a los nuevos estilos de juegos.
La faceta de combate es simple, tal vez demasiado para algunos gustos. Se trata de apretar botones para conseguir combos simples y esquivar algún que otro ataque. Los amantes de los soulslike seguro no van a encontrar un gran desafío en ese apartado y, si lo que el jugador quiere es correr, puede que resulte incluso un impasse aburrido. Además, muchos minijefes se repiten o reaparecen y es imposible esquivarlos, lo que puede resultar en algo monótono. Eso no significa que las peleas finales de cada una de las cinco islas sean aburridas, de hecho estos enfrentamientos puede ser de lo más atractivos.
El objetivo es juntar esmeraldas del Caos. Para eso hay que recolectar engranajes que permiten abrir portales al mundo virtual donde se consiguen llaves que se usan para desbloquear las bóvedas donde están las gemas. Sí, puede ser un poco confuso al principio, pero con la práctica resulta más simple seguir el proceso.
Sonic Frontiers de Sonic Team y SEGA plantea una jugabilidad simple, que con la práctica se vuelve clara y fácil de asimilar. Es una buena propuesta para los nuevos jugadores del mundo del erizo. Tal vez para los más veteranos resulte extraño pero, si logran adaptarse, encontrarán una buena cantidad de opciones para entretenerse. ¿Es el juego definitivo de Sonic? Claramente no, pero puede ser un buen punto de partida para lo que venga por delante.
Sonic Frontiers de Sonic Team y Sega
Plataformas: PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X/S, Nintendo Switch y PC