¿Tiembla Google? Inversores gigantes 'coquetean' con Microsoft

Cuando parecía que la batalla más importante de Internet iba a ser entre Google y Meta (anteriormente Facebook), la Inteligencia Artificial (IA) se convirtió en una de las tecnologías más prometedoras y capturó la atención de los usuarios.

Microsoft y Bill Gates tuvieron la visión de esto y ahora dominan la escena con su plataforma OpenAI y su ChatGPT. En contraste, Google no se preparó adecuadamente y ahora se enfrenta a su mayor amenaza en 25 años, lo que pone en juego miles de millones de dólares en contratos, acciones y, sobre todo, su posición en el mercado.

En marzo, los empleados de Google se sorprendieron al descubrir que la coreana Samsung, planeaba cambiar el motor de búsqueda predeterminado de sus dispositivos móviles por Bing.

Históricamente, Google ha ocupado este lugar y parecía que esto no iba a cambiar. Sin embargo, la incorporación de la IA en el buscador de Bing lo volvió muy interesante, y esto representa un grave problema para el gigante de las búsquedas por internet.

Según informó el diario New York Times (NYT), la primera reacción de Google ante la noticia fue de "pánico", y con razón: el contrato con Samsung genera 3.000 millones de dólares anuales para la empresa, y si la tendencia continúa, Apple podría también cambiar su motor de búsqueda predeterminado. Este cambio sería aún más preocupante, ya que el acuerdo actual entre Apple y Google asciende a 20.000 millones de dólares anuales.

El mercado también reaccionó a estas noticias, lo que aumentó la preocupación de Google. En las primeras operaciones del lunes, las acciones de Alphabet (la empresa matriz de Google) cayeron hasta un 4,1%, lo que resultó en una pérdida de capitalización de mercado de 57.000 millones de dólares para la compañía. En cambio, las acciones de Microsoft aumentaron un 1,6%.

Microsoft Vs. Google

Hasta el momento, no hay un acuerdo firmado y Samsung podría decidir seguir trabajando con Google. Sin embargo, la sola duda ya ha generado preocupación entre los altos mandos de Google, ya que el 20% de los 4.400 millones de celulares en el mundo son de Samsung. Aunque este porcentaje representa un poco más del 1% de los ingresos anuales de Alphabet, que ascienden a alrededor de u$s 280.000 millones, esta es la última señal de que el dominio del motor de búsqueda de Google podría estar en peligro.

Por otro lado, Microsoft ha visto lo que se avecinaba y gracias a su inversión de u$s 10.000 millones en OpenAI, tiene una "ventaja temprana" en el espacio de la inteligencia artificial. Los analistas de Goldman Sachs liderados por Kash Rangan escribieron en una nota para sus clientes el mes pasado, citada por Forbes, que Microsoft muestra un "vigor renovado" en el mercado de búsqueda.

Desde el lanzamiento de ChatGPT en noviembre del año pasado, las acciones de Microsoft han aumentado un 21%. La incorporación de esta tecnología de IA a sus buscadores Bing y Edge sólo ha aumentado aún más el interés y la apuesta por estas nuevas herramientas.

Google, por su parte, trató de unirse a la tendencia con su chatbot Bard, pero las críticas recibidas fueron mixtas y la herramienta no tuvo una gran acogida. Incluso, durante una demostración, proporcionó información incorrecta, lo que generó una caída en las acciones de Alphabet. Google claramente llegó tarde y no logró mantenerse al día con el ritmo de innovación en el mercado de la búsqueda impulsado por la inteligencia artificial.

Google no se rinde

Desde hace años, Google ha estado investigando la Inteligencia Artificial (IA) a través de su laboratorio DeepMind en Londres. Aunque la empresa utilizó grandes modelos de lenguaje para mejorar la calidad de sus resultados de búsqueda, decidió no adoptar completamente la IA debido a su tendencia a generar declaraciones falsas y sesgadas.

Sin embargo, con la participación líder de ChatGPT y Microsoft en la carrera, Google cambió de rumbo. Ahora, la compañía Alphabet invirtió su dinero y esfuerzo en el proyecto Magi, con la intención de liderar el próximo gran avance en la IA. Según una persona informada sobre el trabajo en el proyecto, Google tiene más de 160 empleados trabajando a tiempo completo en él, según informa el NYT.

No es de extrañar que Google tenga un gran interés en la IA, ya que el negocio de las búsquedas le genera alrededor de u$s 160.000 millones al año. La mayoría de ese dinero proviene de los anuncios de búsqueda, lo cual es fundamental en el desarrollo del proyecto Magi. Según el mismo medio, algunas de las funciones que se lanzarán en el próximo mes solo estarán disponibles en Estados Unidos.

Algunas de las funciones que Google planea sumar rápidamente a su buscador, son:

• Mantener los anuncios en la combinación de resultados de búsqueda. Las consultas de búsqueda que podrían conducir a una transacción financiera, como comprar zapatos o reservar un vuelo, por ejemplo, aún mostrarían anuncios en sus páginas de resultados.
• Las adiciones de búsqueda planificadas también podrían responder preguntas sobre la codificación de software y escribir código en función de la solicitud de un usuario. Google puede colocar un anuncio debajo de las respuestas del código de la computadora, según un documento.
• Las personas podrán usar los mapas de Google Earth con la ayuda de la IA.
• También podrán buscar música a través de una conversación con un chatbot.

Otros productos en desarrollo:

• Una herramienta llamada GIFI usaría IA para generar imágenes en los resultados de Google Imágenes.
• Otra herramienta, Tivoli Tutor, enseñaría a los usuarios un nuevo idioma a través de conversaciones de texto de IA abiertas.
• Otro producto más, Searchalong, permitiría a los usuarios hacer preguntas a un chatbot mientras navegan por la web a través del navegador Chrome de Google.

“Si somos el motor de búsqueda líder y este es un nuevo atributo, una nueva función, una nueva característica de los motores de búsqueda, queremos asegurarnos de que también estamos en esta carrera”, declaró Jim Lecinski, exvicepresidente de ventas y servicios de Google.