Boca sufrió más de la cuenta pero se metió en la siguiente instancia
El Xeneize y Nacional empataron 2 a 2 y la historia se definió desde los 12 pasos, donde Chiquito Romero fue el héroe de la noche
Boca Juniors eliminó por penales a Nacional de Uruguay luego de igualar 2 a 2 en los 90 minutos (más el 0 a 0 de la ida) y definió 4 a 2 la serie desde los 12 pasos, donde Sergio Romero contuvo dos disparos. El Xeneize sufrió más de lo esperado, pero pasó a los cuartos de final, donde espera por Racing o Nacional de Medellín.
El conjunto de Almirón salió a jugar con un 4-3-1- 2 con Cavani y Merentiel en la ofensiva. En la mitad de cancha se pararon Pol Fernández, Varela y Barco que tuvo mucha movilidad por la izquierda, mientras que Medina se paró de enganche. El equipo montevideano comenzó con un 4-2-3-1 con Bruno Damiani de punta.
El ex PSG arrancó jugando como extremo izquierdo mientras que Merentiel se colocó por el otro sector. La primera ocasión fue del dueño de casa con la proyección de Barco al fondo, tiró un centro atrás y en el punto penal definió mordido Cavani y se fue desviado. A esa altura, el local era dueño de la pelota y manejaba los tiempos del partido.
A los 12´, Boca abrió el marcador a través de Merentiel. La jugada comenzó por la derecha con un centro de Advíncula que terminó con un cabezazo en el centro del área del ex Godoy Cruz que venció al portero Salvador Ichazo. Ese gol le trajo tranquilidad al dueño de casa pero también una distracción en el fondo que terminó padeciendo. Porque en la siguiente jugada Alfonso Trezza aprovechó la tardanza de Fabra en la marca para cabecear a quemarropa de Chiquito Romero.
Con 1 a 1, el local continuó con errores defensivos, especialmente en pelotas paradas. Porque Romero le tapó un cabezazo a Damiani ante la atenta mirada de Rojo que nada pudo hacer para evitarlo.
A esa altura, Boca había perdido la pelota, se mostró confundido y aturdido. Medina no entraba en juego como conector entre los mediocampistas y los delanteros, y Merentiel se la rebuscaba retrocediendo unos 10 metros para participar del juego. El local no tenía recursos para atacar salvo alguna corrida de Barco o alguna jugada personal del ex atacante de Defensa y Justicia. A todo esto, cuando el dueño de casa atacaba, quedaba mal parado en defensa y la visita aprovechaba la contra como arma para lastimar. Fue así como quedó Zabala mano a mano con Chiquito, pero se apuró al definir y se fue desviado.
En el entretiempo, Almirón movió el banco de suplentes: Bruno Valdez ingresó por Jorge Figal y mientras el equipo se acomodó, un pésimo rechazo de Gonzalo Castro permitió un remate perfecto de Luis Advíncula a colocar contra el palo izquierdo de Ichazo para marcar el 2 a 1. Entró dormido Nacional y pagó las consecuencias. Boca, en cambio, se metió rápido en partido y atosigó a su rival. Cambió la actitud con respecto al primer tiempo, presionó en todos los sectores de la cancha, salió a comerse a su rival y pegó primero con el tanto del peruano.
Luego, el entrenador Almirón decidió hacer una sustitución para modificar su sistema de juego. Entró Marcelo Weingandt por Merentiel y el equipo se acomodó con un 4-5-1 con Cavani de centro delantero. Con esta nueva manera de jugar, pudo estirar la diferencia pero desperdició ocasiones de gol que tuvieron Cavani, Medina y Advíncula. También, hubo un momento para empujones y peleas entre futbolistas de ambos equipos. Los de Nacional focalizaron su enojo contra Barco por un pase sin mirar del juvenil, y al ver esto tanto Rojo como Fabra salieron rápidamente en su defensa.
Cuando el local estaba cerca del tercero, el conjunto de Álvaro Gutiérrez llegó al empate por intermedio del recién ingresado Juan Ramírez. El empate generó mucha tensión y nervios entre los hinchas Xeneizes y se enmudeció La Bombonera. Ingresaron Darío Benedetto, Nicolas Valentini, Exequiel Zeballos por Rojo, Cavani y Varela. Pero los cambios no modificaron la tónica del juego. Sobre el final del encuentro, en la misma jugada lo tuvo Pipa y luego Weingandt.
En un duro y parejo choque de Libertadores, Boca y Nacional empataron 2 a 2, en la ida habían igualado sin goles en Montevideo, y se definió por penales. Allí, Romero fue el héroe de la jornada ya que le contuvo los disparos a Ramírez y Bocanegra. En el Xeneize anotaron Zeballos, Benedetto, Valentini y Barco, mientras que Pol Fernández desvió su intento.
Boca está en cuartos. Ahora espera al duelo entre Racing y Nacional de Medellín. Los colombianos ganaron la ida 4-2 y todo se define en el Cilindro este jueves.