Sonrisas, chistes y enojos: ¿cómo se muestran los candidatos en las redes sociales?

Los argentinos deberemos concurrir varias veces a las urnas en este 2023, y los candidatos parecen haberse adaptado a las nuevas formas de comunicación: las redes sociales copan casi todo, por esa facilidad que tienen de llegar hasta lo más íntimo del electorado. Pero hay una salvedad: esos mismos candidatos se muestran con diferentes facetas, dependiendo de qué plataforma elijan para mostrarse.

Especialistas en comunicación y tecnología analizaron los discursos de los precandidatos, y allí surgió el dato: suelen mostrarse enojados en Twitter, divertidos en TikTok y felices en Instagram. "Las redes sociales pueden considerarse parte de su campaña política", comenta Guillermo Vagni, asesor de comunicación digital durante la campaña de Juntos por el Cambio del 2015. "Lo que diferencia a estos mensajes de una campaña tradicional es que están dirigidos a un segmento específico de la población", agregó.

La diferencia clave con respecto a la propaganda tradicional es que no hay, como objetivo, un mismo spot: cada mensaje se adapta a las lógicas y formatos que se requieren para cada red social. Y el humor o estado de ánimo de cada una obliga a cambiar también el mensaje. 

La bronca en Twitter

La red del pajarito es la más usada por los dirigentes cuando quieren reaccionar de primera mano a declaraciones y noticias, y también para instalar en los medios sus propias opiniones. 

Allí, los candidatos se muestran crudos, enojados, reaccionarios y contestatarios. Uno de los más activos en Twitter es Fernando Iglesias, a quien se lo puede ver incluso en el Congreso con su celular, llevando la cuenta de cada palabra expresada en las sesiones.

Juan Courel, director de las últimas dos campañas presidenciales del Frente de Todos, asegura que "en Twitter, los políticos expresan mensajes de agenda o discusión política".

Las sonrisas en Instagram

Las cuentas verificadas en Instagram son utilizadas como canal de comunicación rápido, con el fin de anunciar eventos y mantener contacto con los usuarios en esa red.

Courel califica a Instagram como la plataforma de la "cobertura visual" de la agenda. No obstante, asegura que los equipos de campañas hacen foco en las redes sociales "con más profesionalismo que hace algunos años", y cuenta su experiencia en la campaña del 2015: "Hoy, casi todos los partidos se adaptaron a los nuevos instrumentos que brindan las redes para analizar datos, armar comunidades, y producir contenidos virales".

La simpatía de TikTok

La red social de origen chino tiene menos actividad política, pero no están ausentes los candidatos. Aquí se muestran con un mensaje "más dinámico", que respete el formato de la plataforma. En suma, en TikTok se los puede ver más simpáticos que en otras plataformas. 

Esta red, según Juan Courel, "apunta al votante joven, aunque actualmente todos los estratos sociales y segmentos etarios utilizan plataformas digitales". Los adultos son los que usan más Facebook, pero en la red azul se replican o se reenvían las publicaciones de otras. 

La intención es clara: acercarse a los segmentos jóvenes del electorado que no están interesados en política, y que pasan gran parte del día en esas plataformas. "Pero la cantidad de seguidores que tenga un candidato en esas redes no representan un parámetro de mayor o menor intención de voto, ni tampoco un signo de afinidad", comentaba Vagni.

Las diferencias entre las redes requieren que los equipos de prensa que intentan posicionar un candidato para competir en las elecciones adapten la estrategia general a cada plataforma en la que el candidato difunde mensajes, trabajando en su entonación, interpelación, la elección de actores y propuestas que realiza, si confronta o no, con quiénes y cómo lo hace.