|13/02/24 10:32 PM

Nesting: el placer de hacer nada en casa

En el Interactivo estuvimos conversando sobre la tendencia de quedarse en casa y disfrutar de actividades hipertranquilas. La influencia en la salud mental, física y la renovación de energías

Por Redacción

14 de febrero, 2024 - 07:14

Diego Quindimil, Psicólogo, dialogó con El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook y YouTube de Ciudadano.News), y esto nos dijo respecto a ese gozo por ‘Quedarte en Casa’, hacer lo que te gusta, no salir. Se llama Nesting, viene de “Nest”, que significa nido, y así son las características de este hábito:

Las características del Nesting

“La verdad es que tuve un fin de semana bastante ajetreado… Entonces quedarme en casa un día es placentero. Es muy saludable entonces esto del nesting, que tiene que ver con hacer nido, y, me parece, que va un poco a contramano de lo que propone la sociedad actual, que es esto de la lógica del rendimiento. O sea, siempre tenemos que estar haciendo algo productivo”.

“Esto no es nuevo, es lo que los italianos llaman el ‘Dolce far niente’. Es decir, el placer de hacer nada. Me parece que ahí está la diferencia. No es no hacer nada, sino que es definitivamente la decisión de hacer nada, de desconectar, del ocio. Viste que hay toda una moda: la moda ‘slow´, al revés del ‘fast food’. El ‘slow food’, digamos, esto de comer despacio, es decir, que viene desde hace mucho tiempo y a contramano del ‘fast food’, de la vida hiperproductiva, de la lógica al rendimiento, aparecen estas ideas como el nesting, o como decíamos antes, la vida ‘slow’, permitirse hacer nada sería”.

Nesting positivo o negativo

El profesional de la salud mental resaltó: “Como en todas las cosas, en su justa medida. Es decir, si yo del fin de semana quiero uno de los días, dedicarme a estar en casa, relajar. Pero también está bueno que el nesting no sea solitario, sino que también pueda ser compartido, porque si no, el riesgo que corremos es un aislamiento social. Siempre es interesante poder practicarlo con otro, es decir, no hace falta hacer nada, es decir, puede uno maratonear las series de televisión o dedicarse a mirar el cielo. Es decir, no tiene por qué ser un día productivo”.

Si empezás con que el fin de semana voy a limpiar la casa, ordenar, tirar lo que tengo que tirar, arreglar algo de la casa. Bueno, terminás el fin de semana más agotado que la semana. Y también está este fenómeno, no sé si te acordás que alguna vez lo hablamos, del `fomo`, del miedo a quedar afuera. Entonces, la gente va saltando de plan en plan, se llena de planes los fines de semana. Y entonces también, no te permite descansar y, bueno, el lunes estás agotado”.

Nesting planificado

“Yo lo pondría en positivo. Es decir, esto de quiero hacer nada; que uno lo tome como una decisión premeditada y no algo que sea nocivo como que bueno, la cama te termina tirando o el aislamiento, sino que es una decisión consciente de este domingo, este sábado, este martes feriado quiero hacer nada. No quiero ir a shopping, no quiero ir a ningún lado. Me quiero quedar en casa porque mi casa es mi lugar, me gusta, digamos, y armo mi nido ahí”.

Nesting aburrido, pero sin aislamiento social

“Por eso hablaba de cuando es una decisión consciente y cuando es un aislamiento social, un aislamiento de los otros. También, nosotros como sociedad le tenemos miedo al aburrimiento y me parece que también hay que bancársela, porque muchas veces las mejores ideas salen del aburrimiento, hay que poder tolerar el aburrimiento. Entonces, esto por ahí sería una recomendación: poder soportar, sostener y bancarse el aburrimiento”, reflexionó el entrevistado.

 

Se recomienda hacer la práctica del Nesting siempre acompañado para reducir el riesgo de aislamiento

Nesting alejado de la tecnología

“Para el nesting una buena práctica es no estar todo el día atrapado por la tecnología. Es decir, el celular. Porque ahí te terminás sintiendo que perdiste el tiempo. Y el nesting no tiene que ver con la pérdida de tiempo, sino que tiene que ver con una decisión, una desconexión. Poder vincularte con las cosas más sencillas de la vida, cómo, no sé, por ejemplo, hacer un budín, pero, todo dentro del marco de tu hogar”.

Conciliar el nesting en la pareja

Quindimil sostuvo: “Siempre en las relaciones de parejas sucede esto, decir que hay uno que es más activo, otro que por ahí prefiere estar más casero y ahí hay que negociar, poder tener estos espacios, como te decía, si vos tenés el sábado y el domingo, o un rato del sábado nos quedamos adentro. Hacemos nesting y el resto salimos. O uno de los dos días lo dedicamos a descansar y el otro día a disfrutar de las alternativas que nos pueden dar los distintos lugares donde vivimos”.

Nesting consensuado y consciente

Mientras que sea una decisión consciente de querer quedarse con uno mismo, me parece que es una buena posibilidad. Por ahí la cuestión es que la recomendación es no aislarse y si uno puede compartir este hacer nada con otro, que no tiene por qué ser tu pareja, puede ser un amigo, un familiar, etcétera, es importante también poder disfrutarlo. También, tenemos que tener un tiempo para querer estar solos. Hay muchos de nosotros que nos gusta estar solos y disfrutar de ese momento, de no querer estar acompañado. Cuando esto se exacerba, corremos el riesgo de un aislamiento, una potencial de depresión, etcétera”, explicó el profesional.

Un viejo hábito con nuevos nombres

Esto es el ‘Dolce far niente’ desde hace dos siglos. Hoy será el Nesting y mañana encontraremos otra nueva palabra, digamos”, concluyó el entrevistado.

Producción Periodística: Alejandro Álvarez – Fernando García