Denuncia conjunta
En el marco de las crecientes tensiones entre las empresas aeronáuticas y los gremios, Intercargo ha seguido los pasos de Aerolíneas Argentinas al denunciar a dos sindicatos ante la Secretaría de Trabajo del Ministerio de Capital Humano de la Nación. Esta acción fue dirigida contra la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA), según un comunicado emitido por la empresa estatal.
El documento señala que, en cumplimiento con las directrices establecidas por la Secretaría de Transporte de la Nación, Intercargo descontará las horas no trabajadas en los aeropuertos donde se llevaron a cabo las asambleas sindicales. La medida afectará a 235 empleados, de los cuales 212 pertenecen a APA y 23 a UPSA. Los descuentos oscilarán entre $8.220 y $13.000 para los miembros de APA, mientras que para los representantes de UPSA, las deducciones serán de entre $20.500 y $24.300, lo que representa un total acumulado cercano a los 3 millones de pesos.
La denuncia, presentada formalmente hoy, expone que las mencionadas asociaciones sindicales han utilizado las asambleas como un medio para interrumpir los servicios de la empresa, lo que ha sido calificado como un "paro encubierto" con la intención de boicotear las operaciones de Intercargo.
El documento enfatiza que estas asambleas, que comenzaron el 19 de agosto, han paralizado las operaciones por más de 14 horas y se extenderán hasta el 30 de agosto, según lo anunciado por los propios sindicatos. Hasta la fecha, estas medidas han perjudicado a más de 6.500 pasajeros debido a cancelaciones y a más de 9.000 por demoras, generando contingencias que podrían resultar en reclamos por parte de las compañías aéreas, estimados en más de 30.000 dólares.
La estrategia de Intercargo y Aerolíneas Argentinas busca que la Secretaría de Trabajo intervenga, ordenando a los sindicatos cesar con las medidas de fuerza y restablecer el normal funcionamiento de los servicios aeroportuarios.
En total, ambas empresas han aplicado sanciones económicas a más de 425 empleados por incumplimiento de sus obligaciones laborales. De estos, 200 pertenecen a Aerolíneas Argentinas, vinculados a los gremios de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), mientras que 235 trabajadores de Intercargo están ligados a APA y UPSA.
Este conflicto, que afecta directamente a miles de usuarios y pone en riesgo la estabilidad operativa de las empresas, también podría tener un impacto en la percepción pública de los sindicatos y su rol en la defensa de los derechos laborales frente a la gestión empresarial y estatal.