El Interactivo

Crisis adolescente y suicidio: claves para identificar y prevenir el peligro

En un mundo que cambia a una velocidad vertiginosa, la prevención del suicidio, especialmente entre los jóvenes, se convierte en una prioridad ineludible.

Fernando García

Por Fernando García

9 Septiembre de 2024 - 15:35

Imagen ilustrativa. — Web

En el marco del "Día Mundial para la Prevención del Suicidio", que se conmemora el 10 de septiembre, Alba Jauregui, vocera del "Centro: Ayuda al Suicidio", abordó en El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook, YouTube y FM 91.7 de Ciudadano.News), la preocupante realidad del incremento de suicidios en adolescentes, un fenómeno que no solo afecta a Argentina, sino que se ha extendido a nivel mundial.

Jauregui explicó que uno de los factores clave detrás del aumento de estos casos es la crisis de valores en la sociedad actual: "Estamos en una época en donde los valores que imperaban no son los que imperan, y es muy difícil aceptar los cambios. Algunos cambios producen crisis porque uno no tiene las herramientas necesarias para enfrentarlos".

Este desajuste emocional e intelectual, según Jauregui, se profundiza en los adolescentes, quienes aún no han desarrollado la capacidad de ver los "grises" en la vida. "Para ellos, todo es blanco o negro. Reaccionan con premura, y esto, combinado con la presión social y la inmediatez de las redes, puede llevarlos a pensar que no tienen salida", afirmó.

Un problema multicausal

El suicidio, señaló Jauregui, es un fenómeno multicausal. Las personas que lo consideran experimentan un proceso de idealización suicida, donde los pensamientos negativos se vuelven dominantes. "Una persona en crisis con ideación suicida piensa que lo que le está sucediendo es insuperable. Este pensamiento repetitivo les impide realizar tareas cotidianas como comer, bañarse o trabajar", describió. La especialista hizo énfasis en que, aunque el suicidio parece la solución a sus problemas, en realidad solo "termina con la persona, no con el problema".

El impacto del bullying y las redes sociales

Otro factor que incide directamente en los adolescentes es el bullying, que la entrevistada describió como un fenómeno que siempre ha existido, pero que en la era digital ha cobrado una nueva dimensión. "Hoy, en solo 10 minutos, toda una comunidad puede saber que un adolescente fue víctima de acoso. Esto expone a los jóvenes de una manera devastadora, donde la vergüenza y la sensación de ser frágil pueden desencadenar una crisis emocional".

En este contexto, las redes sociales juegan un papel crucial. La presión por mostrar una vida perfecta y exitosa contribuye a generar un sentimiento de insuficiencia entre los jóvenes. "Mostramos en redes que estamos maravillosos, pero los seres humanos tenemos debilidades y frustraciones. Este contraste genera mucha ansiedad, especialmente en quienes no tienen acceso a internet o no pueden seguir ese ritmo", advirtió.

La importancia de preguntar y escuchar

Una de las claves para prevenir el suicidio, especialmente en adolescentes, es estar atentos a las señales. "Si conocemos a una persona que de repente se aísla, no quiere socializar o cambia su comportamiento de forma drástica, es fundamental preguntarle cómo está", indicó Jauregui. Rompiendo con un mito muy extendido, aclaró que hablar sobre el suicidio no genera más ideación suicida. Al contrario, "preguntar con afecto y respeto puede ser determinante para salvar una vida".

Para quienes detecten a un adolescente en crisis, la especialista recomienda generar una red de apoyo que involucre a familiares, amigos y profesionales de la salud mental. "Los procesos suicidas pueden durar alrededor de 15 días. Es crucial intervenir a tiempo, con medicación, si es necesario, para apagar ese incendio interno", explicó.

Alba Jauregui subrayó la importancia de la contención emocional en tiempos de cambios tan profundos como los que atraviesa la sociedad actual. "Este proceso de reconversión para poder seguir viviendo no es rápido ni sencillo. Está acompañado de situaciones agresivas, frustraciones y un exitismo que nos consume".

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