Entrevista

"¿Cómo puede ser que no garanticemos un almuerzo de calidad en la escuela?"

La pregunta la hizo en 'Círculo Político' Ianina Tuñón, de la UCA, quien trazó un crítico panorama sobre el futuro de la infancia argentina.

Redacción

Por Redacción

16 Agosto de 2024 - 10:00

Foto: web

Un informe reciente de la Universidad Católica Argentina (UCA) determinó que en la Argentina el 63% de los niños y adolescentes es pobre, mientras que el 39,5% tiene carencias de servicios básicos y la inseguridad alimentaria afecta al 32,2% de esa franja etaria.

Para conocer con más profundidad la gravedad de la complicada e indeseada situación, en el programa Círculo Político, de Ciudadano News Radio, fue entrevistada Ianina Tuñón, coordinadora del Barómetro de la Infancia del Observatorio de la Deuda Social de la UCA y una de las autoras del reporte.

Ianina Tuñón sostiene que parte de los chicos viven en inseguridad alimentaria. (Foto: web)

En ese espacio, la también magíster en Ciencias Sociales expresó que "la problemática de la pobreza y de cómo avanza más entre los niños no es una novedad. Lo que viene siendo muy persistente es el crecimiento de la pobreza monetaria, ya que desde 2018 venimos teniendo un incremento con picos como los de la pandemia y el actual".

 "Pero lo más relevante es que muchos de estos déficits que tienen que ver con la educación, la salud, la probabilidad de que un chico tenga estimulación temprana en su casa, con que no tenga que salir a trabajar antes de los 17 años, tiene que ver con cuestiones de la pobreza más estructural en la que muchos niños viven. Una pobreza persistente y crónica que de alguna manera no solo les impide vivir su infancia sino que les está hipotecando su futuro", advirtió.

Un 40% de los chicos reciben algún tipo de alimentación en la escuela. (Foto: web)

"En ese sentido, cuando hablamos de alimentación, lo más básico en términos físicos, podemos encontrar que parte de los chicos viven en inseguridad alimentaria. Sus padres reconocen que el niño no come en cantidad y calidad por problemas económicos, y dentro de este grupo, uno de cada diez lo hace en una situación severa, está en situación de extrema pobreza y sus padres reconocen que el niño experimenta situaciones de hambre", agregó Tuñón con contundencia.

"Por otro lado, tenemos un 40% de chicos que reciben algún tipo de alimentación en la escuela, con lo cual aquí tenemos un desafío muy importante en términos de cómo garantizar una calidad mayor en la alimentación escolar. En los espacios escolares los chicos consumen alimentos poco calóricos y de baja calidad, que producen un problema pandémico que hoy tiene el mundo, que es la obesidad", aseguró Tuñón.

Y después consideró que "la obesidad infantil en Argentina es muy alta, con lo cual ahí tenemos un desafío que de alguna manera es inentendible: ¿cómo puede ser que en el nivel escolar no podamos garantizar un desayuno de calidad, un almuerzo de calidad? Países de la región, como Chile o Brasil, tienen políticas alimentarias escolares que son política de Estado, que se sostienen y que incluso tienen menús diferentes según el ciclo vital del niño".

La obesidad infantil es muy alta en la Argentina. (Foto: web)

Además, Tuñón se refirió a la calidad de la enseñanza de nuestro país, sobre todo para los más chicos, comentando que "tenemos problemáticas vinculadas a lo educativo, clases que no están a la altura de las circunstancias con niños que no acceden a los conocimientos básicos, como es poder aprender a leer y escribir tempranamente, y es uno de los temas que hoy plantea el Ministerio de Educación. Ahí hay problemáticas que son de la escuela, pero que también vienen de las condiciones de pobreza en la que nacen y se desarrollan los niños en sus primeros años de vida, cuando no solo tienen problemas alimentarios, sino también de estimulación emocional e intelectual. Tres de cada diez chicos en promedio no son receptores de historias, cuentos, canciones, es decir, la estimulación que requiere un niño para ir incorporando diferentes palabras y también imaginación".

"La problemática de la desnutrición infantil incide en lugares muy específicos de la Argentina, pero sin dudas el principal problema es la mala nutrición, que es la que está produciendo la epidemia de obesidad en el país, y como sabemos trae muchísimos problemas de salud a posteriori, con lo cual, los dos problemas son atendibles!", consideró después. 

Refiriéndose a ambas problemáticas, explicó que "una tiene una prevalencia baja y muy localizada en lugares de mucha pobreza del país, en poblaciones muy dispersas con muchas dificultades para acceder al sistema de salud, y la obesidad -que es una pandemia- afecta a cuatro de cada diez chicos en la Argentina. Y esa sí implica una política de Estado a una escala muy alta, por eso es que planteaba el desafío que tiene la escuela en términos de brindar una alimentación que sea de calidad".

Y comentó que "este Gobierno ha incrementado de manera significativa la transferencia de ingresos a las infancias, pero todavía tenemos que ver cuál va a ser el peso de los aumentos en el marco de una merma de la inflación. Lo podremos medir próximamente con los datos de nuestra propia encuesta y también con los del INDEC". 

El ministerio a cargo de Sandra Pettovello incrementó de manera significativa la transferencia de ingresos a las infancias. (Foto: web)

"En términos de la política alimentaria, entiendo que ha afectado principalmente a los comedores comunitarios, los comedores barriales, lo cual sin dudas es un problema, porque en la medida que haya una restricción de la alimentación en una población que lo necesita, lo cual no quita que es necesario que sea toda, es necesario que el Estado gestione con transparencia, porque en la medida que así sea también va a ser mayor la calidad de beneficio que va  a recibir la gente que lo necesita", opinó. 

Para finalizar, Tuñón expresó: "En este marco entiendo que las políticas alimentarias escolares no se vieron suspendidas, y son las que llegan a mayor cantidad, como decía, a cuatro de cada diez niños en espacios escolares, que es donde accede a algún tipo de alimentación, lo que es mucho menos en el contexto de comedores comunitarios que atienden a poblaciones de adultos mayores".