¿Cómo preparar viandas saludables para viajes y jornadas largas?
La entrevista con una nutricionista nos ofrece una guía práctica y fundamentada para preparar manjares saludables, asegurando que niños y adultos puedan disfrutar de una alimentación equilibrada
En una entrevista reciente, la destacada pediatra Sabrina Critzmann compartió valiosos consejos en diálogo con El Interactivo (lunes a viernes, de 12 a 14, por Facebook y YouTube de Ciudadano. News) sobre cómo preparar y conservar viandas saludables, especialmente diseñadas para viajes o jornadas largas, asegurando una alimentación equilibrada para niños y adultos por igual.
Critzmann enfatizó la importancia de considerar la vianda como una extensión de las comidas caseras, señalando que no es necesario preparar comidas especiales con numerosos ingredientes. En lugar de eso, sugirió que la vianda puede ser similar a la comida servida la noche anterior, facilitando así la planificación de las comidas para diferentes momentos del día y para personas con distintas necesidades de alimentación.
Una de las principales preocupaciones al preparar viandas es garantizar la seguridad alimentaria, especialmente en lo que respecta a la conservación de la cadena de frío. Critzmann advirtió sobre el riesgo de alimentos como la mayonesa, que deben mantenerse refrigerados para prevenir la contaminación bacteriana. La experta también recomendó el uso de recipientes adecuados y packs de frío para conservar la temperatura de los alimentos durante el viaje o la jornada.
La pediatra también ofreció sugerencias específicas de alimentos adecuados para diferentes momentos del día. Para el desayuno, propuso opciones como chipá con frutas, mientras que para el almuerzo destacó preparaciones como carne o milanesa con fideos y brócoli, u omelette con verduras. Es importante, según Critzmann, priorizar alimentos ricos en hierro y nutrientes esenciales, como legumbres, proteínas animales, frutas y verduras, y acompañar siempre con agua.
Asimismo, la experta hizo hincapié en la importancia de involucrar a los niños en el proceso de preparación de la vianda, fomentando así una relación positiva con la comida y promoviendo hábitos alimenticios saludables desde una edad temprana.
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