|26/04/24 10:40 AM

Aseguran que el odio hacia el 'ex' es clave para el bienestar emocional

Estudios sugieren que la bronca puede ser una parte natural del proceso de superar una ruptura amorosa. Cada persona es única y que el proceso puede variar según las circunstancias individuales

Por Redacción

26 de abril, 2024 - 10:50

Las rupturas amorosas son experiencias dolorosas que dejan huellas en la vida de las personas. El fin de una relación significa no solo la pérdida de un compañero sentimental, sino también la reestructuración de la vida en común y la adaptación a una nueva realidad. En este proceso, surgen diversas emociones que van desde la tristeza y la ira hasta el rencor y el odio hacia la expareja.

Si bien a simple vista odiar a tu expareja puede parecer una actitud negativa y dañina, diversos estudios en psicología del amor sugieren que, en ciertos casos, puede ser beneficioso para la salud mental.

Un proceso de sanación

Un estudio publicado en la revista Cognition and Emotion, destaca la importancia de experimentar emociones negativas hacia la persona con la que se terminó una relación. Los resultados arrojaron que aquellos participantes que expresaban odio o rencor hacia su expareja tenían menos probabilidades de sufrir depresión y mantenían una mejor salud mental en comparación con quienes mantenían un buen vínculo con sus ex.

Los psicólogos explican que este tipo de emociones negativas actúan como un mecanismo de defensa que ayuda a procesar el dolor de la ruptura y a distanciarse emocionalmente de la expareja. Al odiar o sentir rencor, la persona experimenta una especie de "repulsión" que la impulsa a alejarse de la relación pasada y a enfocarse en su propio bienestar.

El papel de los amigos y familiares

En este proceso de sanación, el apoyo de amigos y familiares juega un rol fundamental. Según los expertos, es común que los seres queridos intenten minimizar el dolor de la persona que atraviesa una ruptura, enfocándose en los aspectos positivos de la expareja o restándole importancia a la relación. Sin embargo, estudios sugieren que esta actitud puede ser contraproducente.

Un estudio de la Universidad de Graz, en Austria, publicado en la revista Social Psychological and Personality Science, señala que es más beneficioso para la salud mental que los amigos y familiares validen los sentimientos negativos de la persona hacia su expareja.

Diferencias de género

Los estudios también han identificado diferencias en la forma en que hombres y mujeres experimentan el odio hacia su expareja. Las mujeres tienden a expresar mayor rencor y odio, mientras que los hombres son más propensos a mantener una actitud neutral o incluso positiva.

Esto se debe a que las mujeres, en general, suelen tener expectativas más altas en las relaciones amorosas y consideran que una ruptura implica una pérdida de tiempo y energía. Por otro lado, los hombres tienden a respaldar una actitud más relajada hacia el amor y valoran el aspecto físico y sexual de la relación. Esto puede hacer que se apeguen emocionalmente a sus exparejas durante más tiempo y les resulte más difícil superar la relación.