El mapa de ciudades con mayor peligro sísmico de nuestro país
Luego de 40 años, el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) presentó el mapa de los lugares con mayores chances de que ocurran terremotos
Por Redacción
El Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) fue creado en 1972, con el objetivo de medir los sismos en la Argentina y ejecutar planes de prevención frente a este tipo de fenómenos naturales. Por lo tanto, el año pasado, en concordancia con el 50° aniversario publicó una nueva edición del Manual de Prevención Sísmica, que incluyó un mapa actualizado de la peligrosidad sísmica en cada zona del país.
El trabajo en cuestión viene a actualizar el anterior, que ya tiene 40 años y se encontraba vigente desde 1983, suministra un dato clave: la zona norte y centro de Mendoza y el sur de San Juan son los territorios argentinos con mayores chances de sufrir terremotos ya que ambas provincias tienen áreas clasificadas como Zona 4, cuya peligrosidad sísmica se considera “muy elevada”. La Rioja, Tierra del Fuego, Salta y Jujuy tienen “Zonas 3″, donde la peligrosidad es “elevada” y el resto del país presenta índices de peligrosidad “moderados”, “reducidos” o “muy reducidos”.
En cuanto al mapa actualizado, sirve para saber en qué zona de peligrosidad se está: la zona 4 tiene peligrosidad muy elevada mientras que la 1 presenta peligrosidad muy baja. En la Argentina, el centro y sur de San Juan y el centro y norte de Mendoza son zona 4. Eso implica que allí las construcciones tienen condiciones que deben cumplir en cuanto a resistencia, ductilidad y tipo de materiales.
La aclaración que hacen desde el organismo es que el análisis solo alcanza a lo geológico, lo que está en manos de la naturaleza, pero no considera la vulnerabilidad sísmica, entendida esta como la susceptibilidad de una comunidad y su entorno físico a sufrir daños ante la ocurrencia de un sismo, lo que hablaría de la calidad de la infraestructura, condiciones de vida y ese tipo de razones.
El nuevo mapa, de todos modos, no tiene grandes cambios con el de 1983, pero la diferencia importante entre ambos períodos está en el funcionamiento una red de monitoreo mucho más amplia que antes, que incluye sensores en la Patagonia y en Buenos Aires, vigentes a partir de 2015.
La Red Nacional de Estaciones Sismológicas cuenta actualmente con 50 estaciones distribuidas en todo el país. De acuerdo a los datos publicados en el Manual, esta red se incrementa año a año con el objetivo de registrar la sismicidad en todo el territorio nacional.
El INPRES aclaró un punto que suele confundirse: "sismo y terremoto son sinónimos y representan el proceso físico de liberación súbita de energía de deformación acumulada en las rocas del interior de la Tierra, que se manifiesta por desplazamientos de bloques anteriormente fracturados. Una parte importante de la energía liberada en este proceso se propaga en forma de ondas sísmicas, las cuales son percibidas en la superficie de la Tierra como una vibración".