Hígado graso: riesgos, detección y cómo se puede revertir

Presente estimativamente en alrededor del 30% de la población, y es "cómplice" en potenciar otras patologías mucho más graves 

15 Junio de 2023 - 22:36

hombres-obesos-tienen-barriga-usan-mascara-tienen-dolor-1-jpg.

Los médicos han determinado que los casos de hígado graso son cada vez más frecuente, pero es una patología que se puede revertir si se tienen los cuidados correctos y por supuesto se realiza una detección adecuada y a tiempo, para lo que es crucial contar con buena información.

Esteban González Ballerga, hepatólogo, dialogó con El Interactivo (lunes a viernes de 12 a 14 Hs por http://ciudadano.news), donde explicó qué es esta patología: “Es una definición un poco arbitraria, porque se supone que hasta el 5% del hígado debería tener algún tejido graso, más allá del 5% lo definiríamos como hígado graso".

¿Cómo se puede medir esto? Ahí entra el porcentaje o la presunción, "porque esto es frecuente, más o menos se calcula que el 30% de la gente debería tener hígado graso. Si fuéramos a una parada de colectivo del servicio de diabetes, un paciente con obesidad, el 90% debería tener hígado graso".

A la vez hay dos tipos de hígados grasos, "el que se llama hígado graso simple, que no tiene inflamación, ves la biopsia y es todo grasa y nada más. Y el otro, que es como una hepatitis pero con grasa. Esta segunda, esteatohepatitis no alcohólica, es agresiva más rápidamente que la esteatosis simple".

Además, hay otro factor que incide, “dos grandes hígados grasos, con alcohol y sin", definió Ballerga, "pero una de las maneras de dañar el hígado, con el alcohol, es a través de formar grasa en el hígado. La diferencia es que si dejas de beber, en 8 semanas la grasa se va, es simple. Después si tenés sobrepeso y tenés problemas de alcoholismo tenés doble problema. Hay tres momentos donde el alcohol hace daño en el hígado, la cirrosis, hepatitis y el hígado graso”.

Sobre cuáles son los síntomas que se pueden evidenciar en una persona con hígado graso, dijo: “Lamentablemente casi nada. Es un asesino silencioso. En muchos de los infartos, de los accidentes cerebro vasculares, por lo que están muriendo, uno de los cómplices es el hígado graso. Es una enfermedad lenta, asintomática con gran repercusión en otros órganos, como son las arterias, sobre todo por lo cual tenés mucha más frecuencia de infartarte o tener un ACV".

Prevención

Como se dijo, la información es crucial para prevenir, detectar y combatir la enfermedad: “Es importante hacer chequeos del hígado, lo más probable es que hayan tenido hepatitis A en la niñez, si no la tuvieron se tienen que vacunar", alertó el profesional, y agregó: "Es muy poco probable que no tengas hepatitis C, pero hoy se cura. Eso es básico. Pero si tenés sobrepeso y diabetes, casi seguro tenés hígado graso, y esto profundiza el daño cardiovascular y mucho más, cáncer de colon, de mama, otros cánceres se potencian porque es cómplice de otras enfermedades", agregó, destacando que el hígado graso es la primera causa de trasplante hepático.

“Hay que tomar conciencia, y cuando te dicen que es un poquito de grasa en el hígado, no es así. En un diagnóstico hay que descartar todas las enfermedades. Con una ecografía y un análisis de sangre donde se vea el síndrome metabólico, el colesterol, el azúcar. Hay que hacer un cambio de vida, comer con más verduras, usar aceite de oliva y salir a caminar”, completó.

La nota completa