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Los aviones del Gobierno pasan a la órbita de las Fuerzas Armadas

La flota de aeronaves dependerá, de ahora en adelante, del Ministerio de Defensa que comanda Luis Petri y las Fuerzas Armadas se encargarán del mantenimiento y la operación

Por Redacción

05 de marzo, 2024 - 18:42

La decisión dada a conocer hace horas por el Ejecutivo da cuenta de que la flota de aviones y helicópteros de la Presidencia será transferida a las Fuerzas Armadas, que se hará cargo tanto en lo que respecta al mantenimiento como a la operación, específicamente será tarea de la Fuerza Aérea.

La fuerza que encabeza el brigadier mayor Fernando Luis Mengo, designado por el ministro de Defensa, Luis Petri, pasará a ser responsable del Boeing 757-256 que compró Alberto Fernández antes de dejar el Gobierno, y al que llamaron ARG 01 para no utilizar la denominación Tango, que pertenece a la fuerza militar, y para el anterior mandatario y su partido representaba la dictadura y la represión.

La decisión forma parte de las reducciones del gasto público del Estado, por lo que ahora Presidencia ya no deberá hacerse cargo de los costos de mantenimiento de los aviones, y se trata en total de dos aviones, el Boeing 757 (ARG 01) y un Boeing 737 (ARG 02) más  tres helicópteros, un Black Hawk S70 (ARG 10), un Sikorsky S 76 (ARG 11) y un Sikorsky S 76 (ARG 12). Ya estaba en manos de la Fuerza Aérea un Lear Jet 60.

 

El Boeing 757-256 se adquirió en diciembre del 2022 pero arribó al país a fines de mayo del 2023 y fue usado varias veces por el entonces presidente, Alberto Fernández, así como también por quien era el ministro de Economía, Sergio Massa.

Tuvo un costo de 21.730.000 dólares más la entrega del viejo Tango 01, que estaba valuado en unos 3 millones. Tiene capacidad para 39 pasajeros, cuenta con una suite principal con todas las comodidades, y otras dos habitaciones privadas para visitas que se pueden adaptar como salas de reuniones.

Desde que asumió en el cargo, Milei no usó aviones de la flota oficial y prefirió viajar siempre en vuelos de línea, incluso cuando tuvo que trasladarse al exterior, como para su visita a Israel, a los Estados Unidos, a Italia y al Vaticano.