Rodríguez Larreta le pidió a Cristina que "no engendre más violencia"
Militantes kirchneristas mostraban su apoyo a la vicepresidenta y la Policía de CABA intentó disuadirlos. CFK apuntó contra el Jefe de Gobierno, y este le contestó por redes sociales
Por Redacción
El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, respondió con vehemencia a través de las redes sociales a Cristina Fernández de Kirchner, luego de que esta lo tildara de "represor" ante el operativo de la Policía de CABA en la que intentaba disuadir los ánimos de militantes kirchneristas que apoyaban a la vicepresidenta.
"No engendre más violencia" es la frase que Larreta publicó en su cuenta de Twitter, al tiempo que solicitaba más contribución para mantener la paz social. La concentración de apoyo a Cristina se había dado después de que los fiscales de la causa de la Obra Pública pidieran 12 años de prisión para la ex mandataria nacional.
"Estamos en un momento bisagra de nuestra historia como país. El momento en el cual tenemos que defender a la Justicia independiente y a la división de poderes, pilares fundamentales de nuestra Democracia y de nuestra república”, continuaba el mensaje del jefe de Gobierno porteño.
Larreta consideró también que "las pruebas presentadas por el fiscal son realmente contundentes” y que “a su tiempo, los jueces determinarán las responsabilidades e impondrán, si corresponden, las condenas”.
Más adelante, el funcionario agregó que "todos tenemos la responsabilidad de no engendrar violencia y contribuir a mantener la paz social", al tiempo que aclaraba que la Policía de la Ciudad trabaja siempre en cuidar a los vecinos y también en evitar enfrentamientos.
El origen
Los cruces de mensajes se dieron luego que este lunes los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidieran la pena de 12 años de prisión para Cristina como presunta autora penalmente responsable de los delitos de jefa de una asociación ilícita y administración infiel en perjuicio del Estado, en el marco de la causa de la Obra Pública. Solicitaron asimismo la inhabilitación perpetua para volver a ejercer cargos públicos.
Ante esto, un grupo a favor y otro en contra de la vicepresidenta se autoconvocaron frente al edificio en el que vive en el barrio porteño de Recoleta. Fue allí cuando la Policía intercedió para que no hubiera enfrentamientos entre los bandos: hubo forcejeos, incidentes, y los efectivos tiraron gas pimienta.