Kim celebró sus logros en plenario del Partido de los Trabajadores

Comenzó, este martes 26 de diciembre, el pleno del Partido de los Trabajadores en Corea del Norte, que busca trazar su política exterior para el año entrante.

El inicio de la reunión plenaria del actual Comité Central del Partido de los Trabajadores, que se celebra en la capital, Pionyang, estuvo presidido por el líder del régimen, Kim Jong-un.

Kim aprovechó la instancia para hacer un análisis del año y definió el 2023 como "un año de gran giro y gran cambio" en el que el país asiático "dejó una gran huella en el glorioso curso de desarrollo en los esfuerzos por mejorar el poder nacional y realzar el prestigio del país", dijo la agencia estatal de noticias, emulando las palabras del Jefe de Gobierno.

En este contexto, Kim también señaló que el período que concluye es "un año de gran importancia" que evidenció "derrotas reveladoras y acontecimientos logrados en todos los campos para la construcción socialista y el fortalecimiento del poder nacional".

Durante la sesión inaugural se aprobaron los temas de la agenda de la reunión y se procedió a su discusión, entre ellos, la revisión de la implementación de las políticas estatales llevadas a cabo en 2023, los objetivos de 2024 y una serie de temas para fortalecer la función de liderazgo del partido, sin ofrecerse más detalles.

Corea del Norte cierra el año en curso tras haber demostrado músculo con una exhibición de su crecimiento militar, con varias novedades armamentísticas (un torpedo nuclear, un submarino con capacidad para lanzar varios misiles balísticos, su primer satélite espía y su primer ICBM de combustible sólido).

A lo antedicho, hay que sumar que Pionyang ha reforzado sus lazos con Pekín y Moscú, quienes vetaron nuevas sanciones contra el régimen y le brindaron apoyo geopolítico frente a las presiones de Estados Unidos.