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Brasil y la UE piden "cumplimiento inmediato" de lo dispuesto por La Haya

La cancillería de Brasil considera vinculante e inapelable la exigencia de la Corte Internacional de Justicia, pero el órgano carece de medios coercitivos para garantizar que Israel acate la determinación.

Por Redacción

27 de enero, 2024 - 01:04

El gobierno de Lula da Silva exigió el "cumplimiento inmediato" de la decisión anunciada, al cierre de semana, por la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que encomendó a Israel impedir cualquier acto de genocidio y permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.

Las autoridades diplomáticas del país sudamericano destacaron "la importancia del pleno e inmediato cumplimiento de la decisión" expedida por la máxima instancia judicial de la ONU, de "carácter jurídicamente vinculante", según un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Brasil se unió al pedido de otros Estados y organizaciones, como la Unión Europea, para que Israel atienda el fallo, considerado vinculante e inapelable, pero la CIJ carece de medios coercitivos para garantizar su aplicación.

El gigante sudamericano, junto con Colombia y Bolivia, entre otros, apoyó a Sudáfrica a finales de diciembre, cuando la nación africana presentó en la corte un recurso contra Israel por cometer un supuesto "genocidio".

Este pasado viernes, la Corte, con sede en La Haya, exigió al Estado hebreo "tomar todas las medidas" para "impedir" actos contemplados por la Convención para la prevención de genocidios. Y le instó, a su vez, a "castigar la incitación directa y pública" a cometerlos.

Según funcionarios brasileños, "las medidas cautelares contribuirán para garantizar el cumplimiento de la Convención", indica la nota de Itamaraty.

La decisión, además, ayudará a "proteger los derechos del pueblo palestino", como también "el necesario e inmediato alivio humanitario", destacó el comunicado. Sin embargo, la Corte anunció las medidas de emergencia de carácter cautelar, sin expedirse sobre la cuestión de fondo.

Según analistas jurídicos, esto se traduce en una indeterminación respecto a si las operaciones israelíes en Gaza se encuadran en la figura legal de un genocidio, como presentó Sudáfrica. Dicha decisión, estiman, podría llevar años.