Luto en el fútbol argentino

Humberto el Bocha Maschio, el vuelo al infinito de un grande

El legendario futbolista, falleció este martes a los 91 años. Quedan guardadas en la memoria colectiva sus proezas como la del Equipo de José en1967.

Redacción

Por Redacción

20 Agosto de 2024 - 18:06

El Bocha Maschio también dirigió al Rojo de Avellaneda. — /X

Se fue un grande del fútbol argentino: Humberto Maschio. El Bocha, como lo llamaban, fue uno de los nombres fundamentales del balompié autóctono. Murió este martes a los 91 años, víctima de una insuficiencia renal.

Nació el 10 de febrero de 1933 en Avellaneda. Comenzó su carrera en Arsenal de Lavallol y, luego de destacarse en Quilmes, llegó a Racing en 1954; debutó de modo oficial ante Chacarita en mayo de ese mismo año. En su primera etapa en el club, se desempeñó como delantero, marcaba goles con cierta facilidad y solía demostrar habilidad y una gran destreza.

En 1955 fue el goleador del equipo, con 18 tantos. Su extraordinaria performance lo llevó a la selección nacional; con la camiseta celeste y blanca, disputó los Panamericanos de México 1955, donde la Argentina alcanzó el título. 

Dos años después, integró una de las mejores delanteras de la historia de la selección, "Los Carasucias", con Oreste Osmar Corbatta, Antonio Valentín Angelillo y Omar Sívori, otras glorias de nuestro medio, con quienes obtuvo el Sudamericano de 1957, al aplastar en la final a Brasil. Un Brasil que al año siguiente fue campeón mundial. Fue un contundente 3 a 0, con gritos del propio Maschio, Angelillo y Cruz.

Con seis conquistas, Bocha fue el goleador de aquel torneo. En total, en el seleccionado jugó 12 encuentros, en los que convirtió la misma cantidad de goles. Fue parte de una de las mejores delanteras de la Selección Argentina y tiempo después, jugó un Mundial para Italia, en 1962.

Como en ese entonces los futbolistas sólo podían jugar para las selecciones de los países a los que pertenecían sus clubes, Maschio vistió La Azzurra. Si se toma en cuenta toda su trayectoria profesional, participó en 425 encuentros con 149 goles y 6 campeonatos.

Luego de su etapa en Italia volvió a la Academia en 1966 a pedido del entrenador y amigo Juan José Pizzutti. Fue el eje de aquel llamado "Equipo de José", en el que le aportaba jerarquía a un equipo ancho en la lucha y la combatividad, aunque inteligente y no torpe.

Con ese equipo conquistó la Copa Libertadores y la Copa Intercontinental un año después. El equipo de José fue... 

"Era un equipo moderno. Muy veloz, fantástico por momentos. Cada jugador sabía su función en la cancha y todos éramos importantes. Todos. Pizzuti fue un genio. Tuvo la inmensa virtud de ubicar a todos. Perfumo, que era 6, lo hizo 2. Basile, que era 5, lo puso de 6. Al Panadero (Rubén Díaz) lo movió al lateral izquierdo. Quique Wolf, que era 8, lo metió de 4. Rulli era delantero y lo convirtió en una rueda de auxilio", recordó, tiempo atrás.

Se retiró en 1968. Al año siguiente se lanzó como entrenador y dirigió al seleccionado albiceleste, pero no le fue bien y renunció. 

Al poco tiempo tuvo el desafío de ser DT de Independiente, en donde consiguió la Copa Libertadores y la Interamericana en el año 1973. Y además, fue quien hizo debutar en la Copa Libertadores a Ricardo Enrique Bochini, máximo ídolo del Rojo. "Fue en 1973, en el estadio Centenario, y Maschio me puso en el tercer partido final contra Colo Colo: ganamos 2-1 en el alargue con gol de Giachello. Fue mi primer título, mi primera Copa...", contó alguna vez Bochini.

En los últimos días, se encontraba internado en terapia intensiva tras caerse en su domicilio y pasar 24 horas sin poder levantarse. El exdelantero mantenía una insuficiencia renal y debió estar internado algunos días. Estuvo bajo los cuidados de la terapia intensiva; tenía comprometidos los riñones y el corazón. Producto de esa caída, sufrió un golpe detrás de la nuca y otros abajo de la boca. Así transcurrieron las últimas horas, con máximos cuidados por su frágil estado de salud y su edad avanzada.

El fútbol argentino de luto, con la partida de un gran exponente.