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La cámara anecoica de Minnesota: el cuarto más silencioso del mundo

En los Laboratorios Orfield de Minnesota se encuentra la cámara anecoica, que absorbe todo sonido. El desafío: soportar el silencio extremo sin alucinar. Nadie aguantó más de 45 minutos

25 de agosto, 2023 - 16:49

En los Laboratorios Orfield de Minnesota se encuentra un asombroso hito de la tecnología: la cámara anecoica más silenciosa del mundo, reconocida por los Récords Guinness. Con una capacidad de absorción del 99,99% del sonido, esta cámara se convirtió en una herramienta esencial para la industria, pero también en una experiencia sensorial sorprendente y desafiante para quienes se aventuran en su interior.

El cuarto más silencioso del mundo: te lo contamos en 60 segundos

 

El diseño revolucionario de la cámara, compuesto por dobles paredes de acero, hormigón y cuñas de fibra de vidrio, crea un ambiente donde el nivel de ruido es de increíbles -10 decibeles, inferior al de una habitación tranquila. Fabricantes de motos, electrodomésticos y auriculares recurren a esta cámara para medir la calidad acústica de sus productos. Sin embargo, su impacto en las personas va más allá de lo imaginable.

El silencio absoluto que reina en el interior de la cámara tiene un efecto sorprendente en el cuerpo humano. Al carecer de eco y sonidos externos, los sentidos se agudizan, y el oído se vuelve hipersensible, captando sonidos internos antes inaudibles, como la respiración, el latido del corazón o el movimiento de los intestinos.

Para algunos, esta experiencia puede ser profundamente desorientadora e incluso desagradable, llegando a provocar alucinaciones o pérdida del equilibrio.

Un valiente periodista ostenta el récord de permanencia en esta cámara, aguantando 45 minutos antes de pedir salir del lugar. La mayoría de las personas, sin embargo, no logra soportar más de media hora en este ambiente tan silencioso, que puede desencadenar reacciones intensas y, en ocasiones, perturbadoras en la mente humana.

La cámara anecoica de Minnesota, una maravilla de la tecnología moderna, no solo demuestra el poder de la ciencia en el control del sonido, sino también la vulnerabilidad y la complejidad de la percepción humana en entornos extremos de silencio.

Su influencia en los sentidos sigue siendo un misterio que continúa atrayendo a aquellos dispuestos a enfrentar la experiencia única que esta cámara ofrece.