El acto de roncar puede ser causante de discusiones y momentos tensos, tanto para quien lo tiene que sufrir como para quien lo produce. Generalmente asociado a otros factores, el ronquido es molesto, y quienes intenten dormir al lado de alguien que lo hace estrepitosamente pueden ver complicados sus planes de descansar.
Hace poco, profesionales del Boston Medical Center desarrollaron un método para disminuir los ruidos insoportables que una persona hace al dormir. Se trata de Buteyko, una técnica de respiración que, según destacan, colabora para tratar síntomas de asma, ansiedad, rinitis, y otros trastornos o enfermedades físicas y psíquicas.
Según los científicos de dicho centro, el Buteyko Breathing es un programa que reentrena la respiración. Está indicado para controlar el paso del aire, y aseguran que es natural, clínicamente probado y eficaz.
El Buteyko se llama así por su desarrollador, el doctor Konstantin Buteyko. Allá por los años 50, el científico ucraniano creó esta técnica, con el fin de mostrar resultados que estaban relacionados al asma.
Hadas Golan, patóloga del habla, explicó que el Método Buteyko también podría significar reslutados vinculados a la patología del asma. "Los resultados de los estudios fueron muy eficientes. Las personas con asma redujeron el uso de broncodilatadores en más del 90%, y la medicación con esteroides bajó al 50 de su consumo.
Paso a paso para el Método Buteyko
Cabe acotar que existe muchísima información acerca del método desarrollado por el científico ucraniano. Aquí, algunos pasos para llegar a poner en práctica el Método Buteyko.
1. Respirar por nariz hacia adentro y hacia afuera, en forma controlada y regulada.2. Cerrar poco a poco la boca, y respirar solo por nariz3. No aspirar aire por la boca, ni forzarlo para que salga4. Luego de dos minutos de repetir esta fórmula, focalizar el diafragma.5. Relajar el estómago y realizar una respiración pasiva, para liberar la tensión muscular6. En este punto, varias personas pueden experimentar "hambre de aire. Es algo normal, ya que el dióxido de carbono se va acumulando, como estímulo de la respiración7. Expeler suavemente el aire.