Privatizaciones en marcha: el Gobierno acelera la venta de empresas públicas

El Gobierno argentino ha dado un paso decisivo en su plan de privatizaciones al otorgar mayores poderes al abogado Diego Chaher, un hombre cercano al asesor presidencial Santiago Caputo. A través del decreto 764, publicado el miércoles, Chaher ha sido investido con amplias atribuciones dentro del Ministerio de Economía, permitiéndole desde efectuar despidos hasta liquidar y vender empresas estatales.

De asesor a brazo ejecutor

Chaher, quien hasta julio era sólo un asesor, ahora ostenta el rango de secretario en el equipo del ministro Caputo. "A partir de ahora, todas las empresas tienen que pasar por Chaher. Antes era asesoramiento, ahora es el brazo ejecutor: decide contrataciones, decisiones presupuestarias, transformaciones, puede cerrar o echar", señaló una fuente oficial.

El exgerente del Grupo América ha escalado rápidamente en el gobierno de Javier Milei, de la mano del joven Caputo. Tras cerrar Télam como interventor de los medios públicos, Chaher fue ascendido a la Secretaría de Empresas Públicas, que en julio se reconvirtió en agencia. Ahora, tiene contacto directo con todos los ministros, especialmente con el de Desregulación, Federico Sturzenegger, el jefe de Gabinete Guillermo Francos, y Luis Caputo.

Plan de acción y expectativas

Chaher aún debe designar un subsecretario y cinco directores en la agencia. Desde allí, podrá intervenir en los aspectos legales y normativos de los proyectos de intervención, liquidación, cierre, privatización, venta total o parcial de paquete accionario, iniciativa privada, fusión, escisión, disolución, transformación y disposición estratégica de las participaciones y/o de los activos de las empresas. También controlará las concesiones.

Empresas en la mira

La Ley Bases, promulgada en julio, autorizó la venta de ocho empresas: Enarsa, Intercargo, AYSA, Belgrano Cargas, Trenes Argentinos (Sofse), Corredores Viales, Nucleoeléctrica Argentina (NASA) y Yacimientos Carboníferos Río Turbio. Se espera concretar las primeras transferencias en los próximos meses. "De acá a fin de año vas a tener varias transformaciones y privatizaciones", aseguran en el gobierno.

Desafíos y resistencia

La intención es avanzar con las empresas que ya fueron 'transformadas' mediante la reducción de gastos y personal. En el Gobierno aseguran que ese es el caso de Intercargo, la empresa de asistencia en tierra para las aerolíneas más importante del país. Sin embargo, primero deberá convertirse en Sociedad Anónima y sortear la resistencia sindical, en medio de un fuerte conflicto salarial. "Se viene un recorte", dicen en Economía.

La empresa de aguas argentinas aplicó un fuerte plan de retiros voluntarios que recortó 1.400 empleos. Ahora, entre los interesados en su privatización se encuentra Mekorot, la compañía nacional de agua de Israel, que provee el 80% del agua potable de ese país y controla el suministro en territorios palestinos. Mekorot ya tiene vínculos con Argentina: el exministro de Interior, Eduardo de Pedro, firmó el año pasado un acuerdo de asistencia técnica al que ya adhirieron 12 provincias.

Más allá de la Ley Bases

Por fuera de la Ley Bases, el Gobierno avanza con la auditoría para vender la metalúrgica mendocina IMPSA, que en 2021 había sido estatizada por Alberto Fernández. Este mes, el plazo para que la compañía estadounidense ARC Energy concrete una oferta se extendió hasta el 14 de septiembre. Santiago Caputo también tiene interés en NASA, la operadora de las centrales nucleares, donde todavía busca desembarcar y desplazar a los alfiles de Mauricio Macri.