La Lepra volvió a hacerse fuerte de local y sigue en la punta

La victoria del Deportivo Maipú le metió presión. La Lepra estaba obligada a tener que dejar los tres puntos en casa ante Chacarita Juniors, nada menos que el escolta en la Zona B de la Primera Nacional.

Y lo logró el azul. Con abulia, con incomodidad, pero también con decisión, fue a buscar al Funebrero y lo derrotó en un Bautista Gargantini abarrotado de bote a bote.

Independiente Rivadavia se recuperó de gran forma en ese Parque inexpugnable y se quedó con la victoria ante Chacarita por la fecha 21 de la zona B de la Primera Nacional.

Ya se sabía que el Cruzado había vencido a Tristán Suárez 3 a 2 así que el Azul necesitaba ganarle al equipo de San Martín con el objetivo de seguir en lo más alto de la zona, ya que el Botellero había atrapado momentáneamente la cima de las posiciones.

Y no fue fácil para los de Berti. Porque los nervios pesaban más que la lucidez y se encontraron ante un rival que propuso lo suyo, que le trabó los engranajes y generó juego para también intentar la victoria.

Así pasaron un tiempo en modo cero. Pero en el complemento llegaría el magnífico desborde de Juan Manuel Elordi por la izquierda para meter el centro atrás que superó a todos y le quedó limpito al Turco Ham. El ex jugador de Argentinos Juniors la calzó como vino, con el empeine “de zapatilla” para c lavarla en el ángulo y dejar parado al arquero de Chaca.

Fue una descarga emocional. Porque con el gol, Independiente Rivadavia Sacó a relucir su conocido temple, el que lo llevó hasta lo más alto y así manejar los tiempos y el partido.

Así se quedó con una victoria vital para seguir en la punta.  La decimotercera victoria en el campeonato. Suma 43 puntos, uno más que el Deportivo Maipú, y ahora cuatro respecto de Chacarita, otro de sus más inmediatos perseguidores en la Primera Nacional.

Ahora los del Loco Berti visitarán a Tristán Suárez, el sábado próximo.