La fiscalía de Jujuy desestimó finalmente la denuncia presentada por el árbitro Lucas Comesaña, quien había asegurado no tener garantías de seguridad en el polémico partido entre Gimnasia de Jujuy y Deportivo Madryn, por los cuartos de final del reducido de la Primera Nacional.
Aquel encuentro del 19 de octubre, que el "Lobo" ganaba 1-0, se suspendió en el entretiempo luego de que Comesaña declarara haber sido presionado y amenazado en el vestuario. Su informe llevó a la AFA a darle el triunfo 3-0 a Madryn, resultado que terminó siendo clave para el recorrido del equipo patagónico, hoy finalista por el segundo ascenso.
Sin embargo, tras revisar cámaras y testimonios, la Unidad Fiscal Especializada determinó que la seguridad del cuerpo arbitral "siempre estuvo garantizada" y que el juez no sufrió agresiones dentro ni fuera del estadio. El fiscal Diego Ignacio Funes incluso señaló que la suspensión "puso en riesgo la clasificación del equipo local".
En medio de esa investigación surgió otro dato: la fiscalía ratificó que el cuarto árbitro, Gustavo Benítez, había sido denunciado por un episodio de discriminación hacia un alcanzapelotas menor de edad.
Otro antecedente con Deportivo Madryn
El caso Madryn volvió a quedar en el centro de la escena porque en semifinales ante Deportivo Morón se dio otra situación polémica: la AFA sancionó al DT rival, Walter Otta, por declaraciones contra Claudio Tapia y Pablo Toviggino que luego fueron desmentidas.
Con todo esto sobre la mesa, permanece firme el fallo que benefició a Deportivo Madryn y dejó a Gimnasia de Jujuy con otro año más en la segunda categoría.

