¿Tenés que empezar terapia? Las 6 señales clave para descubrirlo
La situación sanitaria que azota al mundo desde 2020 dejó serios problemas emocionales y mentales en la población mundial
Por Redacción
El Instituto de Neurología cognitiva Ineco realizó una investigación que visibilizó que la incertidumbre, el miedo y el encierro provocado por la pandemia de COVID-19 provocaron problemas en el estado de ánimo, grandes dosis de estrés e insomnio entre otras afecciones.
La ansiedad y la depresión hoy son palabras comunes en gran parte de la población que sufre el impacto del encierro, debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio y lo manifiesta con problemas de salud mental. Las personas que ya sufrían trastornos agravaron los síntomas de los mismos. Además los jóvenes y las mujeres sufrieron más las consecuencias que los hombres y los adultos mayores, en este ámbito, indicó el informe de Ineco.
Es necesario tener en cuanta que cuando el estrés, el insomnio y la ansiedad no nos permiten realizar las actividades diarias, es necesario acudir a terapia, para poder aliviar la tensión y encontrar una solución
Si bien las secuelas de la pandemia aún persisten, de hecho, la revista ‘The Lancet’, publicó un informe que habla de la permanencia de depresión y trastornos de ansiedad en 204 países durante 2020 y además señaló que en ese año se sumaron millones de problemas de salud mental en todo el mundo.
Señales de alerta
El cerebro tiende a cuidarse y frente a situaciones de estrés extremo tiene un mecanismo de protección que hace que los sujetos actúen de maneras diferentes. Gracias a los estudios mentales realizados, las señales de alerta se pueden identificar para prevenir estados de salud mental graves.
- Creer que se está padeciendo un malestar que es innecesario.
- El padecimiento genera problemas para llevar adelante actividades cotidianas.
- No relacionar el malestar con problemas psicológicos.
- Sentir que los problemas no tienen solución posible.
- Tener ganas de cambiar aspectos internos para mejorar el estado de ánimo, pero no saber cómo hacerlo.
- Considerar que es no es necesaria la ayuda de un experto y considerar que es un malestar o padecimiento temporal.