Las facturas de los servicios esconden secretos que hay que descubrir y entender para saber qué estamos pagando. Ahora, mientras el gobierno transita un "Período de Transición” para cambiar el esquema subsidios generalizados hacia otro más focalizado, es importante conocer los detalles de las mismas, en este caso, la del gas.
A revisar
Lo primero a conocer es que los usuarios residenciales se clasifican en ocho categorías: R1, R21, R22, R23, R31, R32, R33, R34. Estas los agrupan según el volumen de consumo y son variables, definiéndose en cada período de facturación. Es decir, se considera el último año y aquellos que consumieron menos tiene la tarifa más económica.
Los subsidios
Desde 2022 se implementó un régimen de segmentación de subsidios para usuarios residenciales, divididos en tres, según los ingresos por hogar, medidos en canastas básicas totales (CBT): Usuarios del servicio de ingresos altos (N1): 3.5 o más CBT Usuarios del servicio de ingresos medios (N3) entre 1 y 3,5 CB Usuarios del servicio de ingresos bajos (N2): menos de 1 canasta básica total
De esta forma, depende del segmento al que pertenezca el usuario la cantidad de subsidio al precio de gas en boca de pozo que reciba. Otro punto a tener en cuenta es que el cuadro tarifario está dividido por regiones.
Del cruce de estas tres variables, categoría de consumo, segmentación RASE, y subzona tarifaria, sale el cuadro tarifario en el que se basan las facturas.
Sin embargo, incluso hay que tener en cuenta algunos beneficios como el de “Zona Fría”, que afecta a las provincias que por sus condiciones climáticas deben utilizar más gas. Los hogares alcanzados por este beneficio tienen una bonificación del 30% en la tarifa, porcentaje que se eleva al 50% en el caso de los usuarios con tarifa social o ubicados en la Región Patagónica, el departamento de Malargüe en Mendoza y la Región de la “Puna”.
Dentro de la factura, entonces, el usuario encontrará los impuestos, y los detalle de los conceptos facturados: el cargo fijo específico para cada categoría, y el cargo variable, es decir, el propio consumo. Este se determina multiplicando la cantidad de metros cúbicos consumidos por el valor que dicho metro cúbico tiene para ese usuario.
Tips de ahorro
Se recomiendan seguir los siguientes tips para poder gastar un poco menos de gas: Regular termostatos a una temperatura ambiente de 20°C Calefaccionar solo los ambientes donde haya gente y, en espacios grandes, cerrar accesos y puertas a otras habitaciones. No abrir ventanas para bajar la temperatura, sino hacerlo con el propio artefacto. Utilizar burletes para que no se pierda el calor. Los pilotos automáticos representan, aproximadamente, el 10% del consumo.