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Crece el uso de vapeadores entre los más jóvenes: precauciones y advertencias

La nueva modalidad de fumar fue prohibida por la ANMAT en el año 2011, pero se siguen vendiendo libremente y sin ningún control. Preocupación por niños de 13 años que ya lo utilizan

Por Redacción

31 de mayo, 2023 - 14:40

Cada 31 de mayo se conmemora el Día Mundial sin Tabaco, una fecha que intenta generar conciencia y prevención en la población sobre los problemas de salud que trae aparejado el consumo de cigarrillos. En este marco, la Federación Argentina de Cardiología (FAC) pone el foco en los cigarrillos electrónicos o vapeadores, que también son un riesgo para la salud.

 

 

La 4º Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, realizada en el 2018, destacó algunos números relacionados con los vapeadores que generan preocupación, apuntando tanto a la población adulta como a los más jóvenes. A saber:

-Adultos: 1,1%
-Jóvenes entre 13 y 15 años: 7,1%

Actualmente, más de 12 millones de adultos en Estados Unidos utilizan cigarrillos electrónicos, con tasas más altas en personas entre 18 y 24 años.

 

 

Estos vapeadores están vedados en la República Argentina desde el 2011, a través de la disposición 3226/2011, con la que "se prohíbe la importación, distribución, comercialización y publicidad y/o promoción del sistema electrónico de administración de nicotina denominado 'cigarrillo electrónico', extendiéndose dicha prohibición a todo tipo de accesorio para dicho sistema o dispositivo, como asimismo a cartuchos conteniendo nicotina". Sin embargo, esto no quita que todavía se siga comercializando en el país de forma clandestina.

 

Riesgos para la salud

Los estudios científicos de los últimos años han demostrado que el uso del cigarrillo electrónico puede resultar en:

-Adicción: contienen nicotina, una droga altamente adictiva. No es necesario vapear todos los días para volverse adicto. 

-Volverse fumador: quienes vapean tienen más probabilidades de comenzar a fumar cigarrillos convencionales

-Ansiedad y depresión: la nicotina aumenta estas dos sensaciones, y afecta a la memoria, la concentración, el autocontrol y la atención. 

-Neuroinflamación: un proceso inflamatorio que ocurre en el cerebro.

-Impotencia: el vapeo puede causar disfunción sexual en los hombres.

 

 

-Insomnio

-Exposición a sustancias químicas cancerígenas

-Bronquitis crónica

-Daño en los pulmones que puede poner en riesgo la vida

-Inmunodepresión: favorece el desarrollo de infecciones

-Riesgo de explosión de baterías con quemaduras

-Intoxicación inadvertida en niños pequeños, por el color atractivo y sabor de los líquidos de los cartuchos (fruta, café, chocolate)

 

 

¿Qué es un vapeador o cigarrillo electrónico?

El vapeador es un dispositivo que produce un aerosol que se aspira y simula el acto de fumar. Consiste en tres elementos: una batería, un atomizador y un cartucho. El líquido de los cartuchos puede contener nicotina en dosis variables, y otros elementos como canabinoides, tetrahidrocanabinol, propilenglicol, glicerina vegetal, saborizantes, aromatizantes y otros aditivos, como el acetato de vitamina E.

Según la médica Cecilia Cortés, cardióloga miembro de la FAC, detalla que "las diferencias en el voltaje de las baterías y los sistemas de circuitos para calentar la solución y transformarla en un aerosol pueden contribuir a la formación de sustancias tóxicas en las emisiones. Están fabricados por las mismas compañías que venden cigarrillos ordinarios. Su publicidad está pensada para la gente joven".

Los vapeadores no son inofensivos: emiten aerosol y no vapor de agua. El aerosol contiene numerosas sustancias tóxicas y cancerígenas, al tiempo que los datos científicos actuales demuestran que no sirven para dejar de fumar.

 

El escenario actual

La existencia de vapeadores o cigarrillos electrónicos en Argentina demuestra que el escenario actual no es suficiente para la protección de la salud, que nuestro país tiene que formar parte de las decisiones políticas globales para enfrentar la epidemia del tabaquismo. Ante esto, la OMS generó el Convenio Marco para el Control del Tabaco, que aún no fue ratificado por el Congreso nacional.

 

El lema de campaña de la Organización Mundial de la Salud de este 2023 es "Cultivemos alimentos, no tabaco". El cultivo de tabaco es perjudicial para la salud, la de los agricultores y la del planeta entero. La industria tabacalera interfiere en los intentos de sustituir el cultivo de tabaco, con lo que contribuye a la crisis alimentaria mundial.