Un niño de 11 años murió en un balneario de Chile tras ser aplastado por un castillo de arena. Si bien fue derivado de urgencia a un centro de salud, no pudieron salvarle la vida.
El trágico suceso tuvo lugar el sábado pasado, en la playa Peuño, ubicado en la comuna de Pelluhue, Maule.
Todo ocurrió cuando dos hermanitos, menores de edad, estaban construyendo un castillo de arena en el baleario chileno. En un momento, los chicos hicieron un pequeño túnel junto a la escultura rústica y, cuando quisieron pasar por allí, la estructura se derrumbó y ambos quedaron sepultados bajo la arena, según informó el medio Bío Bío.
Uno de los pequeños logró salir del tumulto de arena por sus propios medios y, al no encontrar a ningún adulto en la playa, fue corriendo hasta su casa para pedir ayuda.
El niño de 11 años quedó bajo la arena, sin poder volver a la superficie, hasta que los familiares llegaron al lugar, lo sacaron y trasladaron de inmediato al hospital más cercano a la playa.
Al llegar al centro de salud, el menor ingresó sin signos vitales y, si bien el personal médico trató reanimarlo por varios minutos, terminaron confirmando su deceso.
Desde la Municipalidad de Pelluhue indicaron: "Por causas que se investigan, la arena cedió y se desmoronó cubriendo por completo a un menor de 11 años, quién fue ingresado al consultorio sin signos vitales".
"Como institución hacemos un llamado a la totalidad de los adultos y padres a estar atentos en las actividades que realizan los menores de edad, para así evitar y prevenir todo tipo de accidentes".
El municipio chileno informó que la investigación sobre este suceso fatal quedó a cargo de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la Policía de Investigaciones de Cauquenes.