¿Por qué mataron a golpes con una bifera a la madre de un concejal?
La víctima fue hallada en uno de los ambientes de la vivienda y se presume que estaba cocinando al momento del ataque, ya que una hornalla estaba prendida
Por Redacción
Una mujer jubilada de 78 años, madre de un concejal del Partido de la Costa bonaerense, fue asesinada a golpes con una plancha para hacer bifes en la cocina de su casa en la localidad balnearia de Mar de Ajó.
Según información de fuentes policiales y judiciales, el cadáver de Beatriz Irma Zaramati fue encontrado en su casa en la calle Blanco Encalada 1047 por su hijo, Sergio Omar Santana, quien es concejal por el PRO en el Partido de la Costa.
La víctima vivía sola en un complejo de dúplex donde tenía otras unidades que alquilaba a terceros y Santana fue a visitar a su madre después de unas vacaciones cuando se encontró con la brutal escena en uno de los ambientes de la casa.
La víctima fue encontrada tendida en el piso de la cocina, y se presume que estaba cocinando cuando fue atacada por el asesino, ya que una de las hornallas estaba encendida. El médico forense, que revisó el cadáver en la escena del crimen, constató que la víctima presentó una lesión en el cráneo producido por un objeto contundente.
Se sospecha que la víctima fue asesinada entre las 20 y las 23 del domingo último, un día antes del hallazgo. La hipótesis de un robo se está analizando porque falta una cajita donde la mujer guardó dinero, aunque no se encontró nada revuelto más allá de una silla caída.
La causa está en manos del fiscal Martín Prieto, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 De La Costa, quien dirigió las primeras diligencias y tareas investigativas en la escena del crimen y supervisó el trabajo de los peritos de Policía Científica.
La plancha para hacer bifes, que se cree fue utilizada como arma homicida, fue secuestrada por los peritos para ser analizada en el laboratorio ante la posibilidad de hallar ADN del autor del crimen.
El caso está siendo investigado por personal de la comisaría de Mar de Ajó y detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Dolores.