Militares chilenos: ¿posible conflicto con Argentina?

La reciente renuncia del Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Chile, general Guillermo Paiva, a causa del escándalo generado por la filtración de correos de su dependencia ha puesto sobre el tapete, nuevamente, la puja geopolítica entre Santiago y Buenos Aires, las definiciones limítrofes pendientes en la Patagonia, las hipótesis de conflicto y las anomalías en la relación diplomática bilateral.

La fuga de los "cables confidenciales" tuvo como responsable, supuestamente, al grupo "hacker activista" denominado "Guacamaya", que expuso una serie de percepciones elaboradas por la oficina de Paiva. Estos lineamientos incluyen a la Argentina y abordan un abanico considerable de aspectos en lo que concerniente a la sinuosa relación entre ambas naciones.

El informe confidencial

Uno de los documentos de carácter más sensible es un reporte de 29 páginas, que involucra todo un compendio de estimaciones elaboradas por el oficial de alto rango y que están dirigidas, mayoritariamente, al Ministerio de Defensa de Chile. Entre sus líneas, y no debiera parecer extraño, se esbozan variadas aristas: amenazas de países vecinos, áreas territoriales y de explotación económica en disputa, las entidades subnacionales que se constituyen como un riesgo a la soberanía estadual y los desafíos relacionados a la adquisición de recursos bélicos por parte de posibles adversarios regionales.

En consonancia, Argentina ocupa un rol de relevancia en los parámetros de análisis por su situación de proximidad, la amplia historia de disputas limítrofes, el interés mutuo en activos de magnitud y la visión sobre la actual conducción política de nuestro Estado.

Boric y Fernández

Sin duda, la llegada de Gabriel Boric a "La Moneda" fue motivo de ansiedad e incertidumbre para la cúpula castrense chilena. El semblante ideológico del nuevo mandatario rompe, en su tipo de gravitación, con los estereotipos de Jefes de Estado democráticos que han conducido al país trasandino tras su regreso de las administraciones inconstitucionales.

Recordemos que, tras la salida del poder de Augusto Pinochet, las fuerzas armadas han mantenido un grado de privilegio presupuestario, autarquía en su designación de oficiales superiores, doctrina operativa autónoma y status de "casta favorecida" en el marco de la sociedad.

La actitud menguante del gobierno para contrarrestar con dureza los alzamientos de "pueblos originarios" en las regiones más insulares, ha sido visto como una señal de notoria debilidad por parte de los estratos conservadores y por una franja del círculo militar. Existe preocupación de que la actitud dilatoria de la Casa Rosada en lo referente a acciones punitivas contra la denominada RAM (Resistencia ancestral Mapuche) y grupos afines, genera un marco propiciatorio de actos coordinados a ambos lados de la cordillera, ahondando así en la pérdida de control del orden público y en la fragmentación de la integridad territorial.

El apoyo manifiesto de Boric mostrado al presidente Fernández en la "causa Malvinas", fue visto con "ceño fruncido" por muchos elementos de los uniformados. Es una tradición casi histórica y que imperó por más de un siglo, ver a sus pares australes como el adversario natural en un conflicto armado y al Reino Unido como uno de sus referentes mundiales en lo que se refiere a tradición bélica y ejemplo de modernidad y profesionalismo.

Desde lo económico, Chile se dedicó a la explotación del cobre alejándose de cualquier posible intromisión de gobiernos vecinos a través de acuerdos de cooperación conjunta. Ambos Ejecutivos quieren emprender una asociación en lo que se refiere a la extracción del litio y un recurso estratégico de esta envergadura, hace que no se vea con buena predisposición los "codeos amistosos" con gobiernos foráneos y menos aún...con el nuestro.

El kirchnerismo y sus riesgos

Especial atención recibe la interpretación que hace Paiva y sus variables de análisis del peronismo de tinte kirchnerista. El general considera que el populismo puede exacerbarse hasta transformarse en matizaciones de corte fascista con una propaganda nacionalista desmedida. Bajo la bandera del patriotismo y ante la necesidad de desviar miradas fuera del desalentador panorama socio-económico argentino, una "excusa" ideal sería reavivar los reclamos territoriales sobre el campo de hielos continentales e intensificar la proyección sobre el continente antártico. esta visión demuestra que para las fuerzas armadas de Chile el diferendo sobre los glaciares patagónicos y la expansión sobre la estepa blanca se encuentra distante aún de estar finiquitado.

¿Conflicto en Tierra del Fuego?

El puente aéreo anunciado por el Ministro de Defensa argentino, Jorge Taiana, entre Santa Cruz y la Isla Grande de Tierra del Fuego que tendría a la Fuerza Aérea como ejecutora; la instalación del radar de detección de tráfico aéreo de amplio espectro cerca de la ciudad de Río Grande, el anuncio de la construcción de una nueva base naval de la armada para mejorar la asistencia a las misiones científicas en la Antártida, la modernización de las instalaciones del Batallón de Infantería de Marina y el reciente envío de aviones de entrenamiento y ataque ligero IA-63 Pampa a la isla para prestar servicio desde ese asentamiento pone en alerta al comando sur con sede en Punta Arenas.

Hay que insistir, que a diferencia de lo ocurre con la comandancia militar en Buenos Aires, los altos mandos trasandinos funcionan con mucha más independencia y mantienen una desconfianza, aún palpable, sobre las características de la relación con sus homónimos argentinos. Todavía nos ven como un país con aspiraciones expansionistas y que nuestro caos organizacional puede ser excusa para empresas nacionalistas que busquen victorias en la maquinaria de la propaganda gubernamental y que tengan como detonante: la defensa de la soberanía.

Por último, no debemos desestimar que la isla de Tierra del Fuego es considerada como un bastón fundamental en la doctrina de defensa chilena. Prueba fiel de esto, es la rígida estructura de control marítimo del Estrecho de Magallanes que comunica el continente con las urbes isleñas. La disposición de sus unidades de combate están posicionadas de tal forma que permitan ejercer un rápido dominio militar en caso de rispidez. Inclusive, durante el Conflicto del Canal de Beagle que casi nos lleva a una guerra en diciembre de 1978, el escenario principal de las acciones bélicas iba a ser este territorio.

Llamativamente, el informe habla de un “46% de probabilidades de que se produzcan alteraciones a la seguridad nacional y al normal desarrollo de las relaciones diplomáticas bilaterales” con Argentina, ya que categoriza la dinámica entre ambos Estados como un “escenario anormal y con circunstancias cambiantes".

Me parece que lejos estamos, en el contexto actual, de que se desate un conflicto armado real pero es importante comprender y asimilar que, todavía, queda un amplio camino por recorrer para construir una confianza sustentable entre sectores de la sociedad de nuestros países. La jerarquía militar trasandina nos sigue viendo como adversarios y como amenaza...y a corto plazo esa presunción no va a cambiar.