Pakistán: inundaciones cubren el país y dejan 1300 muertos

La República de Pakistán, sufre desastrosas consecuencias a causa de las tormentas masivas que inundaron las tierras de cultivo y numerosas zonas urbanas,  provocando según las autoridades, la peor anegación de los últimos 30 años, con un saldo de aproximadamente 1300 fallecidos.

Estado de emergencia

Islamabad ha puesto en movimiento una cantidad enorme de recursos para implementar una gran operación de rescate y esperando, a su vez, que se acreciente la ayuda internacional en auxilio de las poblaciones afectadas por el evento climático según lo publicado, a la fecha, por la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres (NDMA). El domingo llegaron los primeros vuelos extranjeros de asistencia, procedentes de Turquía y Emiratos Árabes Unidos.

Se estima que 33 millones de habitantes están siendo afectados por las inundaciones y alrededor de un millón de hogares quedaron destruidos o comprometidos estructuralmente,  según los partes públicos del gobierno.

Un comité de crisis decretó el estado de emergencia mientras, grupos de rescate y efectivos de las fuerzas armadas intentan acceder a los pueblos aislados en las zonas cordilleranas del norte del país, lo que hace temer un aumento del balance de víctimas a medida que transcurren los días.

En consonancia, la NDMA indicó que más de 80.000 hectáreas de tierras cultivables quedaron bajo las aguas y más de 3.400 kilómetros de carreteras y 157 puentes han sido mutilados por la tempestad.

Ayuda Internacional

En tanto, Naciones Unidas (ONU) junto al gobierno pakistaní, lanzarán en las próximas horas un pedido de donaciones financieras para recaudar la suma de 160 millones de dólares destinados a la adquisición de medicamentos de primera necesidad, hospitales móviles y equipos de salvamento, según palabras de Stéphane Dujarric, portavoz de Antonio Guterres, secretario general de la organización internacional.

“La ONU  ya ha movilizado 7 millones de dólares, redirigiendo dinero de otros programas, para financiar las necesidades más urgentes”, como alimentos, agua potable, equipamiento sanitario, asistencia materna y refugio, entre otros, comentó el funcionario.

Cambio Climático

Pakistán sabe experimentar con frecuencia fuertes tormentas durante la temporada de monzones, que suele ir de junio a setiembre, y que son benéficas para el riego de los cultivos y la reconstitución de caudales de agua. Sin embargo, paneles de expertos afirman que la voracidad destructiva que se cierne sobre la nación asiática está incentivada por el cambio climático que aumenta la intensidad y frecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos en todo el planeta.

Otra problemática consecuente es la ola de desplazados que se acerca al medio millón y que terminan hacinadas en campamentos improvisados y carentes de servicios básicos, tras perder sus hogares por las inundaciones generalizadas. Los especialistas  en este tipo de “sucesos” opinan que lo que acontece en Pakistán es sólo el preludio de similares desastres en otras regiones del mundo.